Dinamarca y Países Bajos, que lideran un programa para entrenar a pilotos ucranianos, recibieron de buena manera la noticia. Recordemos que desde Kiev se insiste sin parar durante meses presionando para recibir estas aeronaves.

El gobierno de Estados Unidos informó a Dinamarca y a Países Bajos que permitirá que entreguen aviones de combate F-16 de fabricación estadounidense a Ucrania.

Todo lo anterior se llevará a cabo cuando los pilotos del país sepan pilotarlos, señaló este viernes el Departamento de Estado.

Tanto Dinamarca como los Países Bajos, que lideran el programa para entrenar a los pilotos de Ucrania en los F-16, han recibido “garantías formales” para la transferencia, afirmó un portavoz del Departamento de Estado.

“De esta manera, Ucrania puede aprovechar al máximo sus nuevas capacidades tan pronto como el primer grupo de pilotos complete su entrenamiento”, añadió.

La ministra de Defensa de Países Bajos, Kajsa Ollongren, expresó su satisfacción por la medida.

“Nos permite continuar con el entrenamiento de los pilotos ucranianos”, pero “todo lleva su tiempo”, dijo en las redes sociales.

Algunas estimaciones publicadas por The Washington Post sostienen que el proceso de entrenamiento podría terminar recién a mediados de 2024.

Ucrania necesita entre 60 y 80 aviones F-16

Los ucranianos también recibieron con beneplácito la aprobación por parte de Washington.

El ministro de Defensa, Oleksii Reznikov, escribió en redes sociales que había “grandes noticias de nuestros amigos de Estados Unidos”, en referencia a la autorización de aviones de combate F-16.

Kiev lleva meses presionando para conseguir estos cazas.

En julio, Mykhailo Podolyak, asesor principal del presidente Volodimir Zelenski, calculó que necesitan “entre 60 y 80 aviones F-16” para respaldar las operaciones terrestres ofensivas en el sur, de donde Kiev espera expulsar a las fuerzas rusas.

Ucrania había pedido este entrenamiento para reemplazar las grandes pérdidas sufridas por su fuerza aérea, que pilota principalmente aviones rusos.

Los cazabombarderos estadounidenses son mejores en el combate que los que tiene Ucrania, pero es más complicado entrenar a los pilotos en su manejo.