Corría el año 1982 cuando Domingo Sandoval, mejor conocido como el Tío Memo, cerró su ciclo artístico en Chile junto a “Los Bochincheros” y partió rumbo a El Salvador dejando tras de sí una generación que cantaba sus canciones a todo pulmón.
Su llegada a ese país centroamericano fue en el contexto de la fe. Una entrevista en el Canal 8 para hablar de religión. Luego, una visita express al canal 12 donde trabajaba otro chileno ya radicado en San Salvador: el periodista Narciso (Nacho) Castillo, quien lo reconoció inmediatamente y lo alentó a realizar su show en ese territorio.
Fue una casualidad que su esposa, con quien viajaba en ese entonces, le haya puesto en la maleta su ropa artística. Era solo el inicio de una nueva vida que nadie imaginó. El show se trasladó poco después sin previa planificación a tierras centroamericanas con el mismo esquema de diversión infantil, pero en un país en pleno conflicto armado; con niños necesitados de la distracción de las balas y las bombas.
La anécdota de cómo nació “La Tía Bubu”
“El Tío Memo” necesitaba a una artista para el papel de la “Tía Pucheritos”. Su entonces esposa lo realizaba en Chile. “Voy a necesitar una tía”, le dijo a su connacional quien inmediatamente le recomendó a la indicada. “Yo tengo a la persona, es una periodista del canal”, le garantizó Castillo a Sandoval. “Y llama a Regina, y Regina como yo le digo que tiene corazón infantil, inmediatamente se puso juguetona, alegre. Ahí conversamos con Regina y se inventó a la payasita, cómo se tenía que pintar la cara. Yo me llevé a La Chanchita (Piggy) y comenzó el programa que fue una cuestión de mucho éxito. Nos fue muy bien”.
La anécdota la recuerda con nostalgia pero también con emoción cambiando, claro está, el tono al hablar del motivo principal de la llamada de BioBioChile.
“Regina es una muy buena niña”
Regina Cañas, era la artista local con los rasgos exactos para interpretar a la “Tía Pucheritos”. Ella daría vida al personaje que la esposa del artista chileno interpretaba con “Los Bochincheros”, show en el que también estaba incluida “La Chanchita Piggy” un papel ejecutado por Roberto Avendaño, quien falleció en enero pasado por complicaciones de salud.
Con el cuadro artístico completo, el éxito fue llegando rápidamente. Mientras los niños salvadoreños bailaban al son de “La colita es mía” y “La chanchita fue” -éxitos también en Chile- Regina Cañas era la polola del incisivo periodista Mauricio Funes, conocido por poner contra las cuerdas a políticos de izquierda o de derecha. La Tía Bubu, para ese entonces seguía con el show transmitido todas las tardes por la televisión salvadoreña.
“Una gran pena siento porque Regina es una muy buena niña y en realidad no creo que se merezca esto por lo que está pasando” Pero reconoce, en tono paternalista, que es la impresión que tiene de ella hasta donde trabajaron juntos. “Tiene una mente de chiquita por eso hizo el personaje muy bien. Lamento profundamente lo que le está ocurriendo”, concluye el ex artista dueño de emisoras radiales, que ahora está jubilado y residiendo en Santiago la capital chilena. La realidad hoy es muy distinta en el país centroamericano que le dio reconocimiento.
De ser querida por los niños, a requerida por la justicia
El show del Tío Memo culminó en El Salvador cerca de la década de los 90, a casi 10 años llevar diversión a la niñez de ese país. Varios meses antes la Tía Bubu siguió el camino artístico por su cuenta, por eso el ex artista chileno dice que no tuvo más contacto con ella y luego partió a Guatemala y a otras naciones centroamericanas con su programa.
Para ese entonces el matrimonio Funes Cañas se había consumado (1989) pero no para perdurar en el tiempo, llegando a su fín pocos años después del enlace
“En realidad nunca supe que tenía un niño de Mauricio”, recalcó Sandoval agregando que no nació mientras estaba trabajando con él. Era su reacción al ponerlo en contexto de los problemas legales que ahora enfrenta su ex compañera de show junto a su hijo.
– ¿No perduró la amistad entre ustedes?
– Cuando yo me vine ya habíamos cambiado de canal, entonces ahí perdimos contacto. Se dividió el equipo”
– Usted no estaba enterado para nada entonces de toda la situación que se ha generado en El Salvador?
– Si. Para nada, para nada y lo lamento profundamente porque Regina tiene mente de niña, por eso es que hacía tan bien el papel de la tía bubu.
Pero ya divorciados por razones que el vox populi atribuía a maltratos físicos e infidelidad, el punto en común de la pareja era su hijo Diego Funes Cañas. Fue el Fiscal General de El Salvador, Douglas Meléndez, quien trajo al presente ese vínculo tras asegurar en conferencia de prensa que, Mauricio Funes quien se convirtió en presidente de la república para el período 2009-2014, estaba implicado en el desvío de 351 millones de dólares de fondos públicos a cuentas de amigos, funcionarios y familiares entre los que figura Regina Cañas- la Tía Bubu- y el hijo de ambos.
Parte del desfalco al estado y contribuyentes mediante la “Operación Saqueo Público”, según la Fiscalía salvadoreña, se llevó a cabo en operaciones clandestinas como la simulación de préstamos. Regina Cañas habría hecho llegar de esta forma 95 mil dólares-60 millones de pesos chilenos- a Diego Funes Cañas quien además realizó viajes de placer con familiares y amigos en 63 ocasiones por un monto de 102 mil dólares pagado con dinero del estado. Ahora, madre e hijo son prófugos de la justicia junto 25 implicados más.
En medio del contexto, el Tío Memo se siente orgulloso al saber de los recuerdos que los salvadoreños guardan del show que realizó junto a Regina Cañas, quien a finales de los 80’s no quiso continuar con este para no dejar la televisora en la que se inició (Canal12).
– ¿Y si usted tuviera la oportunidad de hablar con ella, qué le diría en estos momentos?
– Que lo lamento profundamente, que lamentablemente está pasando por un momento muy difícil y para esto hay que tener mucha fe, mucha confianza y que sino ha obrado mal, no tiene nada que temer.
El principal implicado por los delitos de peculado y lavado de dinero -el exmandatario salvadoreño Mauricio Funes- huyó a Nicaragua desde el año 2016 con su actual compañera de vida Ada Mitchell Guzmán, el pequeño hijo de ambos, además de sus hijos mayores Diego (Hijo de Regina Cañas) y Roberto Funes- también implicado en la trama-. A todo el grupo familiar le fue concedido asilo político por parte del presidente Daniel Ortega, al considerar que los miembros de la familia Funes son perseguidos políticos tal como ellos se autodenominan.
Ada Mitchell-también con orden de captura-está acusada recibir una buena tajada del supuesto desvío de fondos públicos: casi 500 mil dólares según consta en la acusación fiscal. 60 mil de estos en cirugías estéticas en Beverly Hills y decenas de viajes en el extranjero, por un monto de 53 mil dólares- 35 millones de pesos chilenos-. Se suma también la construcción de un lujoso spa en las afueras de San Salvador, en el que era gerente y recibía un sueldo de 10 mil dólares-6 millones de pesos chilenos- pero no de las ganancias del negocio, sino del erario público.
Totalmente ajeno a esto y a la situación legal de Regina Cañas, su ex compañera artística, Domingo Sandoval se enteró de algunos detalles con la entrevista concedida a BioBioChile. Se dio el tiempo para opinar sobre la persona que conoció en otra faceta y aunque su reacción esta vez no tiene el mejor escenario, en contraste se escuchó agradecido del recuerdo que conservan los salvadoreños sobre el programa que hace más de 30 años los hizo bailar y cantar pese a que en la actualidad, la memoria se ve empañada por la acusación contra la Tía Bubu.
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