La actriz estadounidense reveló en una reciente entrevista que el cáncer que la afecta hace varios años llegó a sus huesos y que no está preparada para enfrentar la muerte.

En junio de este año, Shannen Doherty (Charmed y Beverly Hills, 90210) anunció que el cáncer de mama en estadio 4 que le fue diagnosticado en 2015 se había ramificado a su cerebro. Ahora, en una nueva actualización de su estado de salud, la actriz reveló que el avance de la enfermedad no es prometedor.

En una entrevista con People, la artista de 52 años reveló que la enfermedad llegó hasta sus huesos, lo que tendría su vida en vilo.

Ante la noticia, Shannen confesó sentirse asustada y poco preparada para enfrentar la muerte: “No he terminado de vivir. No he terminado de amar. No he terminado de crear. No he terminado de tener esperanza en cambiar las cosas para mejor. No estoy… no estoy lista”, declaró al medio estadounidense. Todo esto además de aseverar lo obvio: “No me quiero morir”.

La actriz fue diagnosticada hace 8 años, momento en que se sometió a una mastectomía y radioterapia. En 2017 el cáncer de mama remitió, pero en 2019, en medio de la pandemia, recibió noticias poco alentadoras de que la enfermedad había pasado súbitamente a estadio 4, uno de los más peligrosos.

Actualmente, la estrella de Hollywood se encuentra próxima a estrenar su podcast “Let’s Be Clear with Shannen Doherty” (“Seamos claros”, en español), donde la actriz hablará de su carrera, relaciones amorosas, las angustiantes etapas de su enfermedad y su salud en general.

Shannen Doherty se hizo conocida en el cine y las pantallas de televisión por su trabajo en las series estadounidenses como Hechiceras, donde interpretó a Prue Halliwell y en Beverly Hills 90210 a Brenda Walsh.