La cantante estadounidense Britney Spears (39) decidió tomarse vacaciones en Hawái junto a su novio, Sam Asghari (27), luego de su mediática declaración frente a la Corte Superior de Los Ángeles, Estados Unidos, en medio del litigio por su tutela.

Fotografías publicadas por la revista People y TMZ la muestran paseando por la paradisíaca Maui, una isla del archipiélago.

La artista también tomó sol plácidamente mientras, al menos en las fotografías, se mostraba alegre.

“La semana pasada fue muy estresante para ambos. Están tratando de disfrutar de unos días tranquilos juntos”, dijo una fuente no identificada, cercana a la pareja, al medio.

Otra fuente señaló que “Sam ha sido la piedra angular de Britney durante años. Él se asegura de que ella coma bien y haga ejercicio (…) Ella se apoya en él para todo. Él trabaja y tiene su propia vida también, pero está cerca tanto como puede”.

Recordemos que la princesa del pop, como se le ha reconocido mundialmente, se encuentra en medio de un litigio legal por su tutela, que está a cargo de su padre hace 13 años, cuando ella comenzó a mostrar un errático comportamiento público.

En ese entonces, cuando corría 2007, fue fotografiada en varias oportunidades mientras caminaba descalza o conduciendo con un hijo en su regazo. El punto de quiebre, no obstante, y por la escena que más es recordada, es aquella en que mientras era perseguida por paparazzis tomó un paraguas y comenzó a golpear un vehículo.

ARCHIVO | Britney Spears

Desde 2020, no obstante, y luego del revuelo mediático, otro tribunal decretó que la firma Bessemer Trust, elegida por la cantante, se convirtiera en cotutora.

La declaración

Fue en abril pasado cuando el abogado de la artista anunció públicamente que ella deseaba hablar en los juzgados, algo que llevaba sin hacer desde el 10 de mayo de 2019, cuando su declaración se tomó a puerta cerrada y nada de lo que dijo se hizo público.

En ese momento, medio centenar de seguidores de la considerada princesa del pop se reunieron frente a los juzgados de Los Ángeles con pancartas en apoyo y mensajes que calificaban de esclavitud la tutela legal por la que son controlados todos los bienes y decisiones.

Su declaración ocurrió virtualmente este miércoles, cuando la intérprete afirmó que su “padre disfruta el control que tiene sobre mí”. Dijo, además, que “le he dicho al mundo que estoy bien y feliz”, y así se ha mostrado a través de sus redes sociales. No obstante, agregó que en realidad “no estoy bien, no estoy feliz, no puedo dormir”.

“Lo que he vivido es vergonzoso y desalentador, y es la principal razón por la que no hablé abiertamente. Pensé que nadie me creería”, apuntó, señalando directamente a su padre: “No tiene sentido que una persona bajo una tutela legal gane dinero”.