Una desconexión del trabajo y los celulares, junto a una conversación o juego alrededor de un café y un par de dulces. Esta tradición del país escandinavo busca hacer que las personas conecten, lo cual puede llevar a un equipo de trabajadores a mejorar sus relaciones interpersonales y, a su vez, la productividad.
Las compañías buscan realizar distintas actividades a lo largo de la jornada laboral, como “pausas activas”, juegos u otro tipo de instancias. Todo con el fin de hacer más llevadera las horas de trabajo, las que pueden volverse eternas.
En Europa, específicamente en Suecia, existe una especie de ritual cultural, implementado también en las organizaciones ubicadas en aquél país: Fika.
O lo que podríamos llamar, un “coffee break” al estilo sueco.
La dosis de cafeína sueca para despejar la mente
Una o dos veces al día, los trabajadores suecos se reúnen en un fika. Guardan los teléfonos y cualquier artículo electrónico que los pueda distraer de una conversación alrededor de un café y/o unos dulces.
El objetivo acá va más allá de la propia bebida caliente: es un momento para conversar, desconectarse, escuchar otras voces y explorar nuevas ideas, perspectivas u opiniones (junto con pasarlo bien).
Según afirma The Wall Street Journal (WSJ), los empleados suecos y sus gerentes dicen que tal tradición “ayuda a impulsar el bienestar, la productividad y la innovación de los empleados, al despejar la mente y fomentar la unión”.
Implementándolo fuera de Suecia
Tal actividad estaría comenzando a integrarse en las rutinas de empresas estadounidenses, como The Grand, cuyo personal enfocado en coaching y liderazgo trabaja de forma remota, pero cada dos viernes, 10 personas se juntan por Zoom para tomar café y conversar.
En el Reino Unido, específicamente en Londres, Hubble (web dedicada a encontrar espacios de trabajo) también tomó la iniciativa luego de que fuera presentada por un trabajador sueco.
¿El resultado? En el caso de esta última, surgió una nueva oferta para una oficina a tiempo parcial, gracias a las conversaciones en torno a un fika.
Dentro de The Grand, los trabajadores deben turnarse para ser anfitriones de una conversación o algún juego de mesa. Según la cofundadora de la empresa, Rei Wang, el pasar más tiempo con sus colaboradores en un ambiente distendido la llevó a ser una mejor líder, según afirma el WSJ.
Desde IKEA, marca que también opera en Chile bajo el alero del grupo Falabella, afirman que “cuando desconectamos durante un corto período de tiempo, nuestra productividad aumenta significativamente“.
Mejor productividad, más cercanía dentro del equipo
¿Valdrá la pena implementarlo? Si bien cada compañía es un mundo, hay ciertos datos con los que se afirma que las pausas activas, como el fika, ayudarían a incrementar la productividad de los trabajadores.
Según una investigación del Instituto de Tecnología de Massachusetts, realizada en trabajadores del call-center de “Bank of America”, se observó que los equipos que tenían descansos de 15 minutos juntos mejoraban su comunicación un 18% a lo largo de la jornada laboral.
La rotación anual fue del 12% para el caso de quienes participaban de las pausas colectivas para tomar un café, versus un 40% para el resto. De esta forma, el trabajo en equipo de aquellos que tuvieron descansos grupales condujo a un incremento anual estimado de US$15 millones anuales.
“Las personas que están en un grupo social muy unido tienen niveles más altos de confianza”, concluyó Ben Waber, investigador principal del estudio.
