La Orquesta Sinfónica de Chile comenzó este viernes la primera de sus 23 presentaciones al mando de su nuevo director ucraniano, Leonid Grin, en el Teatro Universidad de Chile y que tendrá hoy a las 19:40 horas su segunda exhibición.

Grin, quien será el conductor de los primeros tres conciertos, partió la presentación en la que se destacó al consagrado pianista ruso Alexander Markovitch, formando parte de la diversidad de autores e interpretaciones de las tres obras musicalizadas de las que fueron testigo los asistentes.

La Sinfónica interpretó la reconocida Obertura “Caballería Ligera” del director y compositor austro húngaro, Franz von Suppé, nacido en 1819, quien aún permanece en vigente a través de su música al estar inserto en la banda sonora de dibujos animados infantiles.

A la melodía de Suppé, le siguió el Concierto para piano N°2 de Sergei Prokofiev, una pieza brillante, que requiere de grandes capacidades y virtuosismo del solista; una composición extraordinaria, donde el autor enriquece el lenguaje musical del piano y las sonoridades casi a un nivel orquestal. Alexander Markovich, con su imponente presencia, su talento y dominio técnico a toda prueba fue ovacionado por el público tras ofrecer un “encore”, también conocido como interpretación adicional.

El concertista europeo es reconocido mundialmente, además de su carrera particular, por haber dirigido en importantes escenarios a destacadas figuras como Zubin Mehta, Neeme Järvi, Vladimir Jurowski y Paavo Järvi.

Los solistas y grupos correspondientes a las cuatro familias instrumentales de los bronces a las cuerdas, realzaron las múltiples y selectas piezas de cada una de las interpretaciones.

Este primer concierto de la temporada 2014 de la Orquesta Sinfónica de Chile concluyó con la Quinta Sinfonía de Piotr IIlich Tchaikovsky, una de las composiciones más queridas del compositor y probablemente, de toda la música rusa, declaró Grin. “Una sinfonía fundamental donde la idea del destino, que domina la vida humana es expresada una y otra vez en cada movimiento de la obra con increíble poder”, agregó.

El director titular, Leonid Grin, declaró que su principal objetivo durante este año a cargo de la Sinfónica es enviar un mensaje al público de Santiago indicándoles que la música clásica es para todos, es una forma de arte que puede abrir una puerta para el enriquecimiento espiritual de la persona, que es un camino a la paz y la felicidad.

Dentro de lo que será el segundo concierto, programado para el viernes 21 y sábado 22 de marzo, se expondrán piezas musicales como la Sinfonía Sacra del compositor ruso Andrzej Panufnik, Scherzo Capriccioso de Antonín Dvorak y la Quinta Sinfonía de Alexander Glazunov.

Para concluir las presentaciones del mes la cita será el 28 y 29 de marzo para presenciar al violista chileno, Roberto Díaz, quien tras radicarse hace 40 años en Estados Unidos, emprendió su carrera como músico destacado. En esta oportunidad debutará con la Sinfónica de Chile en la interpretación del emblemático Concierto para viola del ruso Alfred Schnittke.

El precio general de las entradas es de $6000, mientras que para estudiantes $2000. Los boletos para la función de hoy pueden adquirirse a través del portal web DaleTicket.cl o directamente en las boleterías del Teatro Universidad de Chile, situado en Plaza Italia a un costado de la estación Baquedano del Metro de Santiago.