“Carne de Perro”, opera prima de Fernando Guazzoni, ya ha ganado diversos premios: el premio Ingmar Bergman del Festival Internacional de Goteborg (Suecia); Tercer Premio Coral a Mejor Opera Prima en el 34º Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana (Cuba); Premio Kutxa Nuevos-Directores del Festival de Cine de San Sebastián (España); y Premio Moviecity en el Festival Internacional de Cine de Valdivia (Chile).

Alejandro Goic interpreta en forma notable a Alejandro, de 55 años, aparentemente un ex-colaboradores de la Dictadura. Es la historia de un paria, de un hombre rechazado por todos, dejado o desechado por el devenir del país.

Carne de Perro indaga y se centra en este personaje que está en los límites de la marginalidad y de su integridad sicológica, sin formular críticas o tomar una postura moral o ética. Y este es un gran valor, ya que deja al espectador esa labor, centrando el relato en delinear los rasgos humanos de Alejandro, lo que hace de manera formidable Goic.

Carne de Perro no es una película fácil. Sin tener casi violencia explícita, la realidad que muestra –que puede servir de una u otra forma de espejo también a quienes estuvieron en la “trinchera” contraria, como aborda por ejemplo la obra de teatro Escuela de Guillermo Calderón, u otros casos de marginalidad- absorbe e incomoda, pero también invita a reflexionar.

A 40 años del Golpe Militar, Carne de perro invita a mirar otro lado, el de otros perdedores: la “carne de perro” de la dictadura, sus agentes, sus torturadores, los DINA y los CNI.

Una historia sin un fin posible, donde la metáfora del agua se reitera como ducha, en la piscina (de la Universidad de Chile) o en el mar, que reitera el uen momento del cine chileno.

Carne de Perro es recomendable por la gran actuación de Goic, y de otros grandes actores chilenos en roles menores como Alfredo Castro, Amparo Noguera o Sergio Hernández.

http://www.youtube.com/watch?v=vynbZwqixic