Luego de ingresar por una puerta trasera al Centro Deportivo Azul para el entrenamiento de este lunes de Universidad de Chile, Johnny Herrera entregó su versión de lo ocurrido esta mañana en Maitencillo, donde fue detenido por conducir en estado de ebriedad.

“Fue lamentable. Andábamos con un grupo de amigos celebrando las Fiestas Patrias en Maitencillo y pasó lo que pasó”, indicó Herrera luego de la práctica universitaria.

“No sé si era control rutinario lo que me tocó, pero sucedió y toca asumir las consecuencias”, complementó el portero.

El futbolista afirmó que “no andaba manejando, pero tocó sacar el jeep de un lugar muy complicado y justo a la salida del estacionamiento estaba Carabineros y me tocó afrontar”.

“Lo hablé con el técnico y está aclarado. Lo único que quiere es que me aboque al equipo, que no vuelva a pasar y le eche para adelante porque vienen cosas importantes”, declaró el jugador universitario.

Herrera también reconoció cierta molestia por la repercusión que tuvo su detención y que sólo su abogado aclararán su situación judicial, aunque negó las versiones que apuntaban al porte de una licencia adulterada de su parte.