Autoridades de la Región de Valparaíso desestimaron las críticas que calificaron de ‘perdonazo’ el proyecto de ley que otorga un indulto general conmutativo a condenados.

La inciativa establece cambios al actual régimen de otorgamiento de libertades condicionales, con el fin de racionalizar el uso de las cárceles para mejorar los niveles de hacinamiento que a nivel nacional llegan al 60% en promedio.

Al respecto, la Seremi de Justicia, María Isabel Ancarola, fue categórica al manifestar que este proyecto no es un ‘perdonazo’. Por lo mismo, precisó que cada uno de los reclusos está sometido a una serie de requerimientos al momento de cumplir el resto de su pena en libertad.

Entre éstos, se encuentran que el reo sea sometido a control penitenciario cada cinco años, además de un registro domiciliario. Si en este plazo el recluso cometiera algún crimen, debe cumplir una pena efectiva por el delito cometido más el saldo que le queda de la pena anterior.

Palabras a las que se sumó la Seremi de Gobierno, María Angélica Silva, quien aclaró que con esta ley se pretende descongestionar los recintos penitenciarios, que sólo albergarán a delincuentes de alta peligrosidad.

La iniciativa favorecerá – en el caso del indulto- a aquellas personas infractoras de la ley penal que cumplen condena de reclusión nocturna por delitos menores o que tienen una salida controlada al medio libre, a extranjeros con residencia ilegal, y a mujeres con conducta sobresaliente, bajo estrictos criterios de selectividad, que han cumplido con dos tercios de la pena.