Seguramente muchas personas alrededor del mundo lloraron al presenciar por televisión la boda entre el príncipe Guillermo y Kate Middleton, pese a no conocerlos en persona, ni tener sentimientos por ellos.

¿Por qué derramar lágrimas que normalmente están reservadas para los momentos de tristeza o estrés?, ¿por qué emocionarse con acontecimientos que le suceden a personas que no conocemos?.

Según explica la psicóloga clínica Shoshana Bennett en declaraciones recogidas por Yahoo.com, “nuestras reacciones individuales se basan en los sentimientos que evocan ciertos acontecimientos en nosotros, mientras somos testigos de ellos”, agregando que “tiene poco o nada que ver con las personas reales involucradas”.

De acuerdo a la experta, esto tiene más que ver con nuestra personalidad y las experiencias del pasado.

Si eres una de esas personas que derraman una lágrima cuando presencian una boda, no te preocupes, no eres demente, ni te estás haciendo daño. De hecho, el llanto es realmente bueno para la salud emocional, ya que es una forma saludable de liberar cualquier emoción contenida y puede incluso levantar hasta tu espíritu después de hacerlo.

Es más, un estudio realizado a casi 200 mujeres holandesas determinó que 9 de cada 10 encuestados dijeron que se sentían mejor después de llorar.

Además, dejar caer lágrimas frente a un amigo que no está llorando, tiene sus ventajas. Y es que tener un hombro para descargar sentimientos ayuda a construir relaciones. Un investigador israelí demostró que el llanto de vulnerabilidad comunica con los demás y puede ayudar a que una persona se sienta más cerca de la otra, reforzando el vínculo entre ambos.

Asimismo, la psicóloga recalca que “cada uno de nosotros reacciona de manera diferente a las ocasiones y eventos, y es importante no juzgar a una reacción como mejor o peor. El punto clave es que no son sentimientos buenos o malos, simplemente lo son.”

Así que relájate y sigue llorando de emoción…