24.600 millones de dólares. Ese es el total de ingresos percibidos por Apple durante su último periodo contable, que va del 26 de diciembre al 26 de marzo.

Sin embargo el informe de la firma de Steve Jobs contiene otra cifra aún más impresionante: un 50% de ese monto proviene del iPhone.

En realidad no sólo del exitoso teléfono, sino también de sus productos y servicios asociados. Y es que si bien Apple vendió 18.45 millones de estos dispositivos el año pasado, gran parte de sus utilidades son fruto de los acuerdos con operadores celulares, accesorios y artículos licenciados.

Según informa TechCrunch, estas cifras no incluyen las aplicaciones vendidas mediante App Store (que se consideran ganancias de iTunes), ni tampoco las de los iPod o iPad.

Y el panorama tiene proyecciones de llegar a ser aún más lucrativo, con el iPhone reportando durante los dos últimos trimestres un 33% y un 39% de sus ingresos totales, respectivamente.

Así las cosas es comprensible que Apple se esté poniendo cada vez más quisquillosa con su teléfono, como mostró al querellarse contra uno de sus socios, Samsung, por supuesto plagio.