El presidente paraguayo, Fernando Lugo, concitó la atención de los periodistas este jueves al arribar a la Casa de Gobierno usando una gorra sobre su cabeza rapada, secuela atribuida a la quimioterapia a la que está siendo sometido por un cáncer.

Lugo fue sometido a una sesión de quimioterapia el 13 de agosto pasado en un hospital especializado de Brasil por un linfoma que le afecta la zona inguinal, el tórax y una de las vértebras de la espina dorsal.

Los médicos del mandatario habían anunciado que esta semana se observarían las primeras secuelas del tratamiento.

Lugo tiene que pasar aún por otras cinco sesiones de rayos, una cada 20 días, de acuerdo al programa establecido por sus médicos para combatir la enfermedad.