Tras el cierre del sumario por la investigación de la llamada “Masacre de Laja y San Rosendo” producto de la ejecución de 19 trabajadores de CMPC y de Ferrocarriles, los familiares y amigos de las víctimas de la dictadura dijeron estar atentos a lo que será la sentencia de los 13 excarabineros que aún sobreviven, quienes reconocieron su participación en el asesinato.

Recordemos que el ministro a cargo del caso, Carlos Aldana, cerró el sumario y está pronto a dictar sentencia, lo que podría ocurrir antes de fin de año.

Después de 43 años, los familiares y amigos saben que los exuniformados del retén de Laja son los autores materiales de los asesinatos y, si bien el ministro Aldana sólo dictaría condena sobre ellos, intentarán buscar reabrir el caso para llegar a los civiles.

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Así lo confirmó a Radio Bío Bío el hijo de Luis Alberto Araneda, Luis Emilio, quien junto a su hermano Mauricio Araneda intentará encontrar lo que llaman la justicia completa, incluidos los civiles.

En tanto, la presidenta de la Agrupación de Víctimas de la Dictadura de Laja y San Rosendo, Gloria Urra, hermana de Raúl Urra, confirmó que la Corporación de Derechos Humanos de Concepción es la que intentará buscar responsabilidades de civiles.

La Masacre de Laja y San Rosendo ocurrió el 18 de septiembre de 1973, pero el secuestro de los 19 trabajadores ocurrió a partir de la mañana del 13 de dicho mes.

El secuestro y posterior asesinato en el Fundo San Juan estuvo a cargo del entonces teniente de 22 años, Alberto Fernández Mitchell, quien al mando de 16 uniformados cometió el crimen.