El destacado disidente chino Hu Jia afirmó que quiere volver a la militancia pero que está reflexionando sobre el impacto que esta decisión tendría en su familia, según sus primeros comentarios después de haber sido liberado de la cárcel el fin de semana pasado.
Durante una entrevista realizada telefónicamente por Cable TV, un canal de televisión de Hong Kong, Hu destacó la importancia de la “lealtad a la moralidad, la lealtad a los derechos de los ciudadanos”.
“Debemos ser leales a nuestra conciencia”, afirmó.
Hu Jia, uno de los principales activistas de los derechos humanos y críticos del gobierno de China, regresó a su casa en Pekín el domingo, indicó su esposa Zeng Jinyan en Twitter, después de cumplir una sentencia de 42 meses por subversión.
La policía china bloqueó el acceso a su hogar, sugiriendo que Hu podría estar bajo alguna forma de arresto domiciliario.
Además de haber sido condenado a una pena de prisión, Hu también debe hacer frente a un año de “privación de derechos políticos”, lo que significa fundamentalmente la prohibición de llevar a cabo actividades políticas, incluyendo no hacer declaraciones a los medios de comunicación.
Durante la entrevista telefónica, Hu afirmó que su familia lo estaba presionando para que evitase los problemas.
“Ellos me han dicho: ‘Vive una vida normal y no choques con el régimen, porque el régimen es muy cruel y arbitrariamente viola la dignidad de sus ciudadanos”, afirmó Hu en la conversación grabada.
“Debo tratar de consolar a mis padres y hacer lo que pueda para consolarlos (…), pero solamente puedo decirles que tendré cuidado”, sostuvo, sugiriendo que le gustaría volver a la militancia.
