Era una tarde de preocupación para Valentina Cano, de 24 años. Se disponía a visitar a su esposo, internado en una clínica, hasta que un desagradable suceso agravó su jornada.

Tras abordar una de las estaciones del metro de Medellín, departamento de Antioquia, en Colombia, una desagradable sensación física la despertó, de golpe, de su recorrido.

Con el vagón del metro repleto, sintió como una mano tocó sus partes íntimas. No pasó mucho tiempo para que el agravio se repitiera, haciéndola reaccionar con toda la indignación y rabia que emana en esos momentos.

“El hombre que lo hizo se aprovechó de la cantidad de gente que había en el metro y me tocó mis partes íntimas. Yo le cogí la mano y vi que era él, inmediatamente hice el escándalo”, aseguró Valentina en sus redes sociales.

El relato fue retomado por el periódico de su país El Tiempo, además de la televisora Caracol, a cuya reportera dijo que identificó plenamente a su agresor. “La alcé (la mano del sujeto) para poder ver quien era. Efectivamente pues vi que era ese muchacho”.

El hecho de que haya grabado la agresión, hizo que esta pudiera conocerse a nivel nacional y fuera de las fronteras colombianas.

En el registro, se le escucha emplazar a quien señalaba como su acosador sexual para que reconociera lo que hizo.

“Muéstreme la cara, muestre la cara”, le gritaba Cano.

En el registro se observa movimiento brusco que parecen ser empujones de los pasajeros al presunto acosador.

El sujeto emite palabras que no se alcanzan a entender, mientras los presentes le reclaman por su actitud.

“Inmediatamente hice el escándalo, otra muchacha dijo que se le tuvo que quitar del lado porque le estaba haciendo lo mismo”, aseguraba Valentina, quien grabó por un buen rato al sujeto.

Minutos después, cuando el sujeto escapaba al abrirse la puerta del vagón. Los gritos comenzaron de nuevo, pero alertando a los presentes a que no lo dejaran huir. Un guardia lo detuvo a pocos metros de su escape.

Lo retuvieron hasta que llegara la policía local. Valentina se quedó hasta que se lo llevaron y le seguía recriminando su agresión: “Yo te cogí la mano. La saqué cogidita y todo para poder verte quién eras”, le reclamaba con voz de llanto.

Cabe destacar que el acusado se desvinculó de las acusaciones de la joven, pese a que dos mujeres aseguraban haber sido víctimas de tocamientos, pero la policía del metro confirmó que este fue detenido para responder por los señalamientos.

Metro de Medellín / El Tiempo

Acoso en pandemia

En septiembre pasado, cuando la pandemia de coronavirus ya tenía bajo zozobra a buena parte del mundo, se hacía viral una denuncia en el vagón exclusivo para mujeres y menores de 12 años, en la línea 6 del metro de México.

Un sujeto, que se hacía tocamientos a sus genitales, fue grabado por una usuaria de este medio de transporte, denunciando la conducta lesiva del individuo, lo que generó una ola de críticas en esa nación.

“Te estoy grabando, eh… para que sepas”, le dijo la usuaria que decidió registrar el comportamiento del sujeto.

El periódico local El Universal publicó el material, relatando además el testimonio de la mujer agredida, quien aseguró que el hombre la observaba fijamente, mientras se tocaba los genitales.

Solo cuando la joven le dice que lo está grabando, interrumpe su conducta. Sin embargo, ella decidió hacerlo viral, poniendo de manifiesto la situación que deben atravesar a diario las mujeres en este sistema de transporte en la nación azteca.

La mujer no dejó de grabarlo hasta que el sujeto descendió del vagón. El metro del Distrito Federal, donde ocurrió el episodio, difundió fotografías del hombre en sus instalaciones y giró una serie de recomendaciones. Una de estas pedía a las usuarias acercarse a denunciar este tipo de hechos a las autoridades de la estación.

Chile: “Qué vergüenza, la cagué”

Este territorio no ha estado exento de las denuncias en las redes sociales, sobre acoso sexual en las líneas de estación del metro de la Región Metropolitana.

En agosto de 2019, un hombre fue grabado por una usuaria, luego que esta se percató del abuso cometido a dos pasajeras, una de estas menor de edad.

Una de las pasajeras lo enfrentó. El sujeto, al verse encarado, decidió huir. Fue cuando Maritza Fres decidió registrar el hecho, para evitar que el hechor se marchara así por así.

“Como nadie hacia nada y este tipo no le iba a pasar nada, la idea era grabarlo y funarlo”, comentó la usuaria, en esa ocasión, a los medios de comunicación.

Al saberse acorralado y grabado, el hombre, de aproximadamente 40 años, reconoció su agresión sexual hacia las pasajeras en presencia de los guardias del metro.

“No lo voy a volver a hacer, puta qué vergüenza, la cagué… es verdad asumo mi responsabilidad (sic)”, dijo el sujeto, lo cual quedó grabado y ejemplifica la situación que algunas mujeres deben enfrentar.

Durante ese año (2019) de 57 llamadas al fono 1488, del Metro de la capital chilena, 14 terminaron en denuncias.

No se sabe, a ciencia cierta, por qué la mayoría de las denuncias se diluyen. No obstante, no se necesita mayor pericia para asumir que ocurre, en buena parte, por la vergüenza y el temor que deriva, tras un acoso sexual como los ejemplificados en esta nota.