El alcalde Joaquín Lavín dio a conocer mayores detalles de cómo sería su cuestionada “brigada encubierta”, integrada por menores de edad que se harían pasar por clientes en locales de venta de alcohol.

La idea de Lavín apunta a disminuir el consumo de alcohol en adolescentes. Sin embargo, ha sido cuestionada por el hecho de contemplar tener a menores de edad trabajando para el municipio simulando ser clientes e intentando comprar licor en botillerías.

Así, ayer reconoció que había recibido el llamado de la subsecretaria de la niñez, Carol Brown, con quien se reunió durante la tarde.

Así, tras el encuentro, esta mañana en conversación con Canal 13 reconoció que “efectivamente hay un tema con el trabajo infantil“.

Ante esto, sostuvo que se “facilitaría” si la brigada -como le ha llamado- es integrada por “jóvenes voluntarios, no contratados, y por supuesto que en acuerdo con la municipalidad y debidamente autorizados por los padres”.

“Un joven, supongamos de 17 años, con autorización de sus padres, y que lo haga porque él quiere jugársela para evitar que se venda alcohol a otros niños, a otros jóvenes, si él lo hace, no hay inconveniente”, detalló.

El jefe comunal dijo que “probablemente nosotros vamos a ir por esa fórmula (…). Tiene que ser voluntario y autorizado notarialmente por los padres. Si eso ocurre, no hay problema”.