“El problema es quién puede viajar y quién no puede viajar a la isla”.

Esas fueron las primeras declaraciones del intendente de Valparaíso, Jorge Martínez, en torno al conflicto que se mantiene en Rapa Nui y que sigue sin permitir la llegada de un vuelo de pasajeros 14 días después.

Pese a que la Municipalidad de Hanga Roa ha mantenido que las 284 personas que irían en el vuelo están habilitadas, y por tanto no son turistas, Martínez indicó que está de acuerdo con la demanda que se asegure que no lleguen turistas a la isla.

Para la autoridad regional, la piedra de tope es definir qué es exactamente un trabajador esencial.

Martínez señaló que no debería haber cuestionamientos que efectivos PDI, de Carabineros o de servicio eléctrico sean esenciales, y a su parecer en eso no hay controversia.

Martínez precisó que el problema está en la letra chica y que la discrepancia se centra en los casos de personas que son continentales pero que han vivido o viven en Rapa Nui, y están tratando de volver.

Sobre este punto, el jefe regional sostuvo estar analizando una propuesta de los isleños que dice relación con modificar la ley y que ellos puedan decidir quién entra o no.

“Tenemos que respetar la ley, no establecer diferencias entre residentes de la etnia y otros que no. Ellos sostienen que se podría modificar la ley para que el mismo pueblo determine quién puede ingresar o no”, comentó.

Sobre acciones concretas, Martínez señaló que están congestionando un vuelo de la FACh a la isla y que han instruido que se retire a las personas que están instaladas hace cerca de dos semanas en las cercanías del aeropuerto.

Según la autoridad, estos últimos días ha habido acercamientos en la mesa de trabajo con los actores del territorio, para finalmente destrabar el conflicto.