Javier Jara, abogado que recientemente asumió la defensa de uno de los cuatro funcionarios del GOPE dados de baja y acusados por el homicidio del comunero Camilo Catrillanca, manifestó que su defendido “no manipuló la evidencia”.
Lo señalado por el defensor de Raúl Ávila (acusado de haber cortado y botado por el baño la tarjeta de memoria) a La Tercera, sigue una argumentación similar a lo señalado por Carlos Alarcón en un video que vio la luz hace unos días, registro donde apuntó que fueron obligados a mentir y que aún faltan antecedentes que deben salir a la luz.
En ese sentido, Jara expresó que “lo único que puedo señalar por ahora es que no me consta que en esa tarjeta hubiera imágenes privadas”, esto en directa relación a lo señalado por el general Hermes Soto en la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputados, instancia en la cual apuntó que el argumento expuesto por Ávila para destruir la tarjeta micro SD que utilizó en el procedimiento donde murió Catrillanca, se debía a que contendría imágenes personales y privadas con su pareja.
“Se le consulta al funcionario dónde está la tarjeta de esa cámara y él señala en ese momento que la destruyó y no la tiene porque -según lo que él manifiesta a su mando superior en ese momento-, había ahí imágenes que lo comprometían en lo personal y familiar y por eso lo destruyó“, añadió -en su momento- Soto ante la comisión previamente señalada.
Asimismo, durante esta jornada un abogado de Carabineros declaró como imputado en la causa derivada del caso Catrillanca, quien de acuerdo a fuentes de Radio Bío Bío redactó la primera declaración que entregaron los 4 exmiembros del “Comando Jungla” acusados del crimen.
Dicha documentación fue presentada ante la Fiscalía de Collipulli, cinco horas después de la muerte de Catrillanca siendo comprobado posteriormente que resultó ser falsa.
