VER RESUMEN

Resumen automático generado con Inteligencia Artificial

Los ministros de Finanzas del G7, reunidos en Stresa, Italia, anunciaron que planean financiar a Ucrania con los intereses de los activos rusos congelados, estimados en hasta 3.000 millones de euros anuales. Además, Estados Unidos presiona a la Unión Europea por un préstamo de 50.000 millones de dólares a Kiev, pero hay incertidumbre sobre la distribución del riesgo y la emisión de la deuda.

Desarrollado por BioBioChile

Los ministros de Finanzas del G7, reunidos en Stresa, en el norte de Italia, anunciaron este sábado su intención de avanzar en un acuerdo para financiar a Ucrania con los intereses generados por los activos rusos congelados.

“Estamos avanzando en nuestras discusiones sobre posibles vías para trasladar los extraordinarios beneficios derivados de los activos soberanos rusos inmovilizados en beneficio de Ucrania”, dice un borrador de declaración al que ha tenido acceso Reuters.

Aunque la decisión definitiva no se tomará hasta mediados de junio, cuando se reúnan los jefes de Estado y de gobierno del G7 en Apulia, en el sur de Italia.

“De acuerdo con nuestros respectivos sistemas legales, los activos soberanos de Rusia en nuestras jurisdicciones permanecerán inmovilizados hasta que Rusia pague por el daño que ha causado a Ucrania”, afirma el borrador del comunicado.

Las conversaciones entre Estados Unidos, Reino Unido, Japón, Alemania, Francia, Italia y Canadá tienen lugar en medio de la ofensiva lanzada hace dos semanas por Rusia en la región de Járkov, en el noreste de Ucrania, que Kiev aseguró el viernes haber detenido. Sin embargo, los combates prosiguen y el ejército ucraniano reconoció el sábado “éxitos parciales” de las tropas rusas y una “situación tensa” en la zona de Ivanivka, en el sur del país.

Intereses de activos rusos llegarían a 3.000 millones de euros anuales

Los países de la Unión Europea dieron un primer paso a principios de mayo con un acuerdo para embargar los intereses generados por los activos congelados de Rusia con el fin de armar a Ucrania. Se calcula que estos ingresos serían de entre 2.500 y 3.000 millones de euros anuales (2.700 y 3.250 millones de dólares).

Estados Unidos quiere ir más allá y presiona para que los países del G7 aprueben un préstamo de unos 50.000 millones de dólares a Kiev, garantizados por los intereses generados en el futuro por estos activos rusos inmovilizados.

Pero hay muchas dudas por clarificar: cómo se repartirá el riesgo entre Estados Unidos y Europa, cómo evolucionarán en el futuro los tipos de interés o quién emitirá la deuda. Además, un acuerdo para un monto tan elevado se ve improbable. “El objetivo es tener un método y tener seguridad en la financiación de Ucrania. No vamos a hablar del monto. Pienso que primero hay que hablar del método”, dijo el ministro de Economía francés, Bruno Le Maire.