El presidente francés expresó en una entrevista al New York Times su malestar por la cobertura que varios medios anglosajones de los recientes ataques yihadistas en Francia. Macron estima que el concepto de laicidad no es comprendido parte de la prensa estadounidense.

El presidente francés Emmanuel Macron llamó al periodista del New York Times Ben Smith para quejarse de cómo parte de la prensa anglosajona cubría la actualidad francesa en el marco de los ataques yihadistas y el debate sobre las caricaturas de Mahoma.

“El presidente tiene algunos huesos para escoger con los medios de comunicación estadounidenses: sobre nuestra ‘parcialidad’, nuestra obsesión con el racismo, nuestras opiniones sobre el terrorismo, nuestra reticencia a expresar solidaridad, aunque sea por un momento, con su asediada república”, explica Smith en el artículo publicado en el New York Times el domingo por la noche.

“Así que el Presidente Emmanuel Macron de Francia me llamó el jueves por la tarde desde su dorada oficina en el Palacio del Elíseo para llevar a casa una queja. Argumentó que la prensa angloamericana, como se la suele llamar en su país, ha culpado a Francia en lugar de a quienes cometieron una serie de ataques terroristas asesinos que comenzaron con la decapitación, el 16 de octubre, de un profesor, Samuel Paty, quien, en una lección sobre la libertad de expresión, había mostrado a su clase las caricaturas de la revista satírica Charlie Hebdo burlándose del profeta Mahoma”, agrega.

“Cuando Francia fue atacada hace cinco años, todas las naciones del mundo nos apoyaron”, sostuvo Macron. “Y cuando veo, en este contexto, muchos periódicos que creo que son de países que comparten nuestros valores, (…) cuando los veo legitimando esta violencia, y diciendo que el centro del problema es que Francia es racista e islamófoba, yo digo: los fundamentos están perdidos”, añade el presidente francés.

El laicismo francés en tela de juicio

El periodista Ben Smith afirma que Macron deplora que los medios de habla inglesa, y en particular los estadounidenses, buscan “imponer sus propios valores en una sociedad diferente”, y les reprocha, según el periodista, no comprender “la laicidad francesa, una separación activa de la Iglesia y el Estado que data de principios del siglo XX”.

Francia ha sufrido recientemente tres atentados islamistas: un ataque con arma blanca a finales de septiembre que dejó dos heridos cerca de las antiguas instalaciones de Charlie Hebdo, la decapitación el 16 de octubre de Samuel Paty, un profesor de historia y geografía que había mostrado a sus alumnos viñetas de Mahoma publicadas por este semanario satírico, y un ataque con cuchillo que dejó tres muertos a finales de octubre en una basílica de Niza.

Tras la decapitación del profesor de Historia, Macron reiteró su apoyo a la libertad de expresión, incluyendo el derecho a caricaturizar a Mahoma.

Sus declaraciones dieron lugar a manifestaciones en todo el mundo musulmán y a declaraciones de líderes como el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, quien acusó al presidente francés de defender la blasfemia contra el Islam y pidió a sus conciudadanos que boicotearan los productos franceses.