Al parecer, los internos de la cárcel de Swaleside (Inglaterra) decidieron hacer justicia por sus propias manos contra Tony Smith, hombre que fue a prisión por torturar a su hijo de 41 días. Los castigos contra el menor habían sido tan graves que debieron amputarle sus piernas.
De acuerdo a lo publicado por el diario inglés Daily Star, Smith fue condenado a 10 años de cárcel en el mes de febrero. Su esposa, Jody Simpson, corrió la misma suerte y fue internada en una cárcel de mujeres.
Casi tres años le había tomado a la justicia británica condenar a la pareja, ya que los crímenes cometidos contra el pequeño, también llamado Tony Smith, ocurrieron en el 2015. Durante el proceso judicial, ambos habían permanecido en prisión preventiva.
La última vez que Tony (hijo) fue sometido a castigos, fue llevado al hospital Pembury de la ciudad de Kent, donde los médicos lograron salvarle la vida, a pesar de encontrar un panorama muy desalentador.
De acuerdo al relato del diario Daily Mail, en ese momento el pequeño Tony estaba gris, tenía el cuerpo hinchado, sufría fallas orgánicas, echaba espuma por la boca y tenía septicemia (infección de la sangre). Por todo esto, sus piernas tuvieron que ser amputadas.
El caso generó profundo dolor en la sociedad inglesa, por lo que se sabía que Tony Smith (padre) debía quedar en un módulo de alta seguridad para evitar posibles ataques de parte de otros reos.
Sin embargo, esta acción ocurrió el pasado 7 de agosto, luego de que dos presos de alta peligrosidad quedaran erróneamente ubicados en el módulo de menor seguridad de Swaleside, donde lo habrían golpeado hasta dejarlo insconciente.
Según Daily Star, Smith fue atado a una silla y golpeado en varias oportunidades con latas de atún y otros metales. El hombre terminó con la zona del ojo fracturada, varias costillas rotas y su mandíbula quebrada.
El medio citado añadió que la paliza se extendió por cuatro horas, hasta que unos gendarmes sacaron a los reos del lugar.
“Los guardias se llevaron a los internos justo a tiempo del lugar. El hombre tiene suerte de estar con vida”, detalló una fuente de la cárcel.
El pequeño tiene una nueva oportunidad
Tony Smith (hijo) actualmente tiene 3 años y está frente a la oportunidad de crecer en un ambiente favorable.
Fue adoptado por Paula Hudgell cuando tenía solamente unos meses de vida y se ha desarrollado en un buen hogar. Ahora está aprendiendo a caminar con unas prótesis que su nueva familia le regaló en Navidad.
Hudgell declaró en una entrevista al diario The Sun que su otro objetivo es conseguir penas más altas para los dos padres del menor.
“La ausencia de sus piernas no va a ser un recuerdo de la crueldad de sus padres, sino de la clase de increíble ser humano que es, fuerte, determinado e inteligente”, concluyó.
