Una multa por 5 UTM ($260 mil pesos, aproximadamente) fue cursada contra el artista local Francisco Papas Fritas en el marco de la intervención urbana “Indicaciones de resistencia”, realizada el 17 de octubre 2020 en el edificio de Almirante Latorre 321 (Plaza Manuel Rodríguez, comuna de Santiago), hoy convertido en el Espacio Social Latorre y habitado por diversas familias y personas sin vivienda.

“En ese edificio viven familias y personas organizadas que se tomaron el lugar en espera de una solución habitacional”, comentó Papas Fritas a BioBioChile en diciembre de 2020 con motivo de una citación cursada por un inspector de la Municipalidad de Santiago al Juzgado de Policía Local, con el fin del “retiro inmediato de letrero tipo sobretecho”.

“Son personas que daban a la comunidad clases de yoga, de kickboxing, hacían tocatas de jazz. Y después, con la pandemia, hicieron una ‘olla común’ abierta al barrio. Son una comunidad que busca la dignidad, que ofrece beneficios a la comunidad, que entrega una retribución comunitaria”, contó.

Ayer, tras el fallo correspondiente, el autor y su abogado Pablo Cuello fueron notificados de la resolución de dicha denuncia, amparada en una ordenanza municipal que prohíbe la instalación de carteles publicitarios sin los permisos respectivos.

“El gran error ahí es que un cartel debe vender un objeto u ofrecer un servicio, y en mi caso no hay ninguno de esos (requisitos)”, resume hoy a casi siete meses de la intervención, donde instaló un cartel de neón (cita explícita al aviso publicitario de champagne Valdivieso en el Parque Bustamante) que muestra una botella de espumante devenida en bomba molotov.

“Para cumplir el rol de un letrero publicitario tendría que existir una venta de algo, y si ves la obra, no se está vendiendo nada”, agrega.

Pablo Cuello, abogado del denunciado, explicó los pasos a seguir: “Ayer presentamos dentro de plazo un recurso de reposición y en subsidio un recurso de apelación. En caso que el Tribunal desestime la reposición deberá remitir el expediente a la Corte de Apelaciones de Santiago”, señaló.

En el texto de “Indicaciones de resistencia”, disponible hoy en el mismo inmueble, se pueden leer las motivaciones de la obra: “La resistencia está en lo micropolítico, en ocupar un edificio para que sea habitado por familias donde la organización social, creando espacios de diálogo y políticos en el día a día”.

“Es una deconstrucción capitalista (o del capitalismo), del día a día, de lo más íntimo del habitar, que es desobediente a la propiedad privada y a los servicios de bienes privados que lucran con la materia prima de un territorio. Esta resistencia dignifica y crea bifurcaciones que posibilitan una subjetividad contraria a la del capitalismo”.

Papas Fritas, el mismo ideólogo de los proyectos artísticos “Ad angusta per angusta” (su recordada quema de pagarés de deudas universitarias de estudiantes de la U. del Mar en 2014); y la reciente “Amortanasia” (2019; donde acompañó a enfermos terminales que solicitaban poner fin a su vida de una forma digna), resume así una de las ideas principales de su última pieza: “Hay sitios que están resistiendo todos los días sin hacer barricadas, día a día“.

La elección de la iconografía del champagne Valdivieso no fue al azar: “Hay una edición especifica que hace la empresa Valdivieso para celebrar los 50 años de servicio del ‘Presidente de la República Augusto Pinochet Ugarte’, el 86. Es una botellita pequeña, que se regaló a todo el Ejército, de 350 cc, que la etiqueta viene con este sello… Yo tengo una”, cuenta acerca de las inspiraciones de su neón, cuya etiqueta lleva la fecha del 18 de octubre de 2019 en números romanos.

El uso de este material tampoco fue aleatorio: “La botella molotov es simbólica. No se trata de un acto violento, de que estés quemando algo: es la posibilidad de defender eso a través de un neón que es un objeto súper frágil, complejo de trabajar, que se hace a mano, y que es una de las cosas costosas en el mundo del arte”, dice.

“Es el oro de los artistas. Pero hay una intención de trabajar con la fragilidad, traducida aquí a una idea de la ficción del fuego. Muchas veces pensamos que la revolución, la revuelta, la acción directa, tiene que ver con acciones ya aprendidas: la barricada, la capucha… Y las acciones de resistencia donde puede correr el fuego para iluminar cosas, están en estos sitios así (como el Espacio Social Latorre), que están resistiendo todos los días, sin hacer barricadas”, explica.

De vuelta a la nueva coyuntura legal que enfrenta hoy, Francisco Papas Fritas se lamenta e ironiza: “Me están haciendo pagar por un delito que yo no he cometido; por último que me hagan pagar por alguno que sí he cometido”.

“Me da risa porque cuando hago proyectos donde el traspaso entre lo legal y lo ilegal es más evidente, nunca me ha pasado nada. Pero cuando las cosas no tienen ninguna coherencia ilegal, me pasan cosas y es como, pero ¿por qué?. Es estúpido, son funciones muy erróneas”, añade.