Por más de 5 horas se extendió el primer día del juicio oral contra 21 personas imputadas de participar en la peligrosa banda conocida como “Los Cavieres”, cuyos defensores aseguraron que la Fiscalía no cuenta con antecedentes suficientes para lograr una condena.

En un juicio que se caracterizó por contar con un alto contingente de seguridad, tanto dentro de la sala de audiencia como en el exterior del Centro de Justicia, se dio inicio al proceso contra los 21 acusados de participar en esta organización criminal que atemorizaba a los vecinos de la población La Victoria.

Es que su presencia dentro de este lugar, emplazado en la comuna de Pedro Aguirre Cerda, era resguardada por soldados, e incluso, según se reveló, se pagó a funcionarios públicos -entre ellos Carabineros y efectivos de Gendarmería- para mantenerlos fuera de peligro.

Una organización que a juicio del Ministerio Público, incurrió en los delitos de tráfico de drogas, asociación ilícita, lavado de activos e infracción a ley de control de armas y explosivos, por lo cual se sumaron más de 400 años de prisión para todos sus integrantes.

Esta banda, según el fiscal de la Zona Sur, Héctor Barros, era liderada por Alejandro Cavieres y su cónyuge Clara Tobar, quienes a lo largo del tiempo lograron conformar una red que amasaba cerca de 2 millones de dólares en patrimonio.

El abogado del Ministerio del Interior, Carlos Chacón, alertó sobre el peligro de este tipo de organizaciones criminales, que distribuyen sus labores a fin de ocultar su actuar ilícito.

En su acusación, la Fiscalía Sur sindicó a Luis Cavieres, Alejandro Cavieres y su esposa Clara Tobar, como los líderes de esta agrupación, que incluso, mantenía una “alianza de cooperación” con otra banda encabezada por Héctor y Miguel Ángel Morales Domínguez.

Para el abogado Belisario Prats, represente de la familia Cavieres, la Fiscalía no podrá acreditar su culpabilidad en los hechos, ya que carecería de antecedentes para demostrarlo.

Similar opinión manifestó el defensor penal César Bunge, representante del abogado Ariel Marín, acusado de lavar el dinero de la organización criminal y conseguir “favores” para la banda, quien expuso que su defendido sólo efectuó labores de asesor legal de la familia.

A fin de acreditar la participación de los 21 acusados, la Fiscalía Sur presentará cerca de 80 testigos, más de 1.000 pruebas documentales, y más de 2.000 escuchas telefónicas, con lo que intentará demostrar el carácter ilícito de esta agrupación.