Hace algunos meses, la enfermera de 32 años, Virginia Rogus, hizo un trato con su hermano: si ella lograba bajar de peso, él se haría un tatuaje con ella.
Virginia, quien trabaja como enfermera de una unidad de emergencia en un hospital en West Virginia, Estados Unidos, sufría de un importante sobrepeso.
Por ello su hermano le propuso que si bajaba 30 kilos, se podrían hacer un tatuaje que hiciera juego.
Ella aceptó, pero no fue fácil. Pasó por varios métodos que no tuvieron el efecto esperado. Eso hasta que encontró una serie de videos en Instagram llamado 75 Hard.
Se trata de un programa creador por el empresario Andy Frisella, que básicamente consiste en crear una “tenacidad mental.
Para ello existen seis reglas básicas que deben seguirse al pie de la letra:
1. Tomarse una foto a diario para mostrar su progreso.
2. Elegir la dieta que más acomode a cada persona.
3. Realizar dos entrenamientos diarios de 45 minutos.
4. Tomar un galón de agua
5. Leer un libro de autoayuda
6. Comprometerse a no autoengañarse con comida poco sana y el alcohol por 75 días.
El resultado
La mujer cumplió las reglas al pie de la letra y el programa tuvo el efecto deseado.
“Yo estaba como,’¿sabes qué? dejame tratar. Probablemente no pase la primera semana”, aseguró al programa Today.
“Siempre me puse excusas como ‘trabajo en turnos de 12 horas y media, no tengo tiempo para ejercitarme y necesito dormir"”, reconoció.
El programa le permitió bajar varios kilos en el primer intento, por lo que descansó tres días y comenzó de nuevo.
“Al comenzar, mi ejercicio era siempre caminar. Caminaba afuera. Andy siempre recuerda que no es necesarios que hagas ejercicios tan intensos. Si realizas dos caminatas de 45 minutos al día, también cuenta”, explicó la mujer.
Luego de eso, decidió unirse al grupo de ciclistas de su tío, algo que siempre había querido hacer. Tomando turnos extras durante la pandemia, reunió el dinero que necesitaba y se compró una bicicleta.
Ese ejercicio, más lo que había aprendido del programa, le permitió bajar más de 50 kilos en total.
“Solía ser una adicta a la TV, que vivía en mi sillón, ahora raramente veo TV. Estoy más activa y disfruto comer mejor y preparar mis comidas”, aseguró.
Tras la transfomración de Virginia, su hermano cumplió el acuerdo y ambos se hicieron tatuajes combinados: sus elecciones fue un astronauta y un buzo.
