La limpieza urbana tiene un costo que se asume entre la municipalidad y los residentes, aunque hay algunos que no deben realizar este pago.

Los derechos de aseo domiciliario en Chile representan un cobro efectuado por las municipalidades a los propietarios o habitantes de inmuebles por el servicio de recolección y disposición final de residuos sólidos domiciliarios.

Se trata de una cuota que considera los servicios de limpieza urbana, que incluyen el barrido de calles, retiro de basura, y otras labores destinadas a mantener la higiene y estética de las comunas.

Esta práctica comenzó en 1996, bajo el marco de la Ley de Rentas Municipales, permitiendo a las municipalidades cobrar directamente por estos servicios.

¿Quiénes pagan derecho de aseo?

En general, la obligación de pagar estos derechos recae sobre los propietarios de bienes inmuebles, ya sean residenciales, comerciales, o terrenos eriazos. Así se asegura una distribución equitativa del costo asociado al mantenimiento de la limpieza y recolección de residuos en las comunas.

La ley especifica que todos los propietarios de inmuebles con un avalúo fiscal por encima de un cierto umbral deben contribuir al pago de los derechos de aseo. Este umbral se establece en 225 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), lo que significa que propiedades con un avalúo fiscal inferior están exentas del pago.

La medida busca proteger a los propietarios de viviendas de menor valor, evitando imponer una carga financiera adicional que podría resultar onerosa para sus presupuestos.

Además, las municipalidades tienen la facultad de otorgar exenciones o rebajas en el pago de estos derechos a grupos vulnerables o personas en situaciones de especial necesidad.

Por ejemplo, individuos de avanzada edad, personas en situación de discapacidad, o familias que viven bajo el umbral de pobreza pueden solicitar una reducción o la exención total del pago.

¿Por qué se deben pagar derechos de aseo y quién los cobra?

La importancia de este pago radica en su contribución directa al mantenimiento de la limpieza y la salubridad de las comunas, financiando actividades esenciales como el barrido de calles, la recolección de basura y otros servicios asociados a la gestión de residuos.

La recaudación de estos derechos se realiza de forma trimestral, y el monto a pagar se establece anualmente por cada municipio en función del costo real de los servicios de aseo proporcionados.

De este modo, cada municipio tiene la responsabilidad de determinar y cobrar estas tarifas directamente a los propietarios de las propiedades. Así vela por la adecuada gestión y financiamiento de los servicios de limpieza urbana.

Para facilitar el cumplimiento de esta obligación, la Ley N° 21.554 ha introducido mecanismos que permiten a las municipalidades ofrecer convenios de pago de hasta doce cuotas por deudas relacionadas con los derechos de aseo.

Además, esta ley permite a las municipalidades condonar hasta el 100% de multas e intereses en casos de pagos al contado y hasta el 70% en convenios de pago.

También se contempla la posibilidad de condonar la totalidad de deudas antiguas, superiores a cinco años, promoviendo así una mayor facilidad y flexibilidad en el manejo de estas obligaciones.

¿Qué ocurre si no pago los derechos de aseo?

El no pago de los derechos de aseo por parte de los propietarios puede tener consecuencias significativas tanto para ellos como para la municipalidad.

Para el propietario, la falta de pago puede acarrear la acumulación de intereses y multas, incrementando la deuda original. Además, las municipalidades tienen la facultad de iniciar acciones de cobro judicial para recuperar las deudas pendientes, lo que podría resultar en procedimientos legales contra el propietario y potencialmente en el embargo de bienes para cubrir la deuda.

Para la municipalidad, el incumplimiento en el pago de los derechos de aseo representa una pérdida de ingresos críticos destinados a financiar los servicios de limpieza y recolección de residuos en la comuna.

Esto puede traducirse en una reducción de la calidad y la frecuencia de estos servicios esenciales, afectando negativamente a la salubridad y el bienestar general de la comunidad.

Si necesitas saber si debes pagar los derechos de aseo, debes buscar directamente en el sitio web de tu municipalidad o preguntar directamente en sus oficinas.