La infertilidad en nuestro país afecta aproximadamente al 15% de las personas. En la mujer, la edad más fértil va de los 20 a los 30 años. Luego baja hacia los 35 años, y a partir de allí se evidencia un descenso de la reproducción, no solo por tener menor calidad en sus óvulos y mayor riesgo de aborto, sino también por otros factores de riesgo que se incrementan. En el hombre, existe un declinar de la función testicular gradual.

Así lo indican desde IVI Santiago, clínica especialista en medicina reproductiva que ya cumple 13 años en Chile, en la cual ayudan a las personas a superar los problemas de fertilidad y las apoyan para lograr su proyecto de familia.

Desde allí explican, respecto a la capacidad reproductiva de la mujer, que a medida que se avanza en edad va disminuyendo la posibilidad de ser madre. Esto es principalmente porque las mujeres nacen con un numero finito de óvulos, que comienzan a disminuir conforme pasan los años.

También su calidad comienza a deteriorarse, lo que tiene un mayor impacto a partir de los 35-37 años, que es cuando los ovocitos caen en cantidad. Lo importante es no dejar pasar el tiempo.

En la actualidad, existen diversos tratamientos de Reproducción Asistida como Inseminación Artificial, Fecundación in Vitro, Ovodonación, entre muchas otras avanzadas técnicas.

Esto permite obtener tasas de éxito acumulada en embarazos sobre el 95% en el caso de la Ovodonación, por ejemplo.

A continuación, se detallan algunos de los tratamientos más populares en esta área.

1. Inseminación Artificial

Este procedimiento, de baja complejidad, es recomendado para pacientes menores de 38 años, que cuenten con una reserva ovárica suficiente. Consiste en la introducción de espermatozoides en el interior de la cavidad uterina.

La inseminación se realiza con una cánula que pasa a través del cuello uterino y que permite introducir la muestra en el interior del útero.

2. Fecundación In Vitro (FIV)

Este tratamiento, sugerido para pacientes más cercanas a los 40 años, consiste en la unión del óvulo con el espermatozoide en el laboratorio -in vitro-, con el fin de obtener embriones ya fecundados para transferir al útero materno.

Esta técnica de fertilización asistida se utiliza cuando han fallado tratamientos previos, como la Inseminación Artificial. Además, es la solución a problemas de esterilidad derivados del factor masculino y el factor tubárico -trompas de Falopio obstruidas-, entre otros.

3. Ovodonación

Procedimiento recomendado para pacientes sobre los 45 años o que presenten alguna enfermedad ovárica, que les impida utilizar su propio material genético.

Este tratamiento, requiere el uso de óvulos donados. Los óvulos de la donante serán inseminados por los espermatozoides de la pareja de la receptora o de un donante para obtener embriones; que luego serán transferidos al útero materno. Es el tratamiento de Medicina Reproductiva con la tasa más elevada de éxito.

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