El Ministerio Público formalizó al exjuez del Segundo Tribunal Tributario Aduanero, Óscar Meriño, por el delito de cohecho agravado. La fiscalía presentó al tribunal la imputación que detalla los cargos en su contra, lo que culminó con la medida cautelar de prisión preventiva para el exmagistrado. En la audiencia se presentaron pruebas clave, entre ellas, un chat encriptado en una app desconocida.
La acusación señala que, entre 2020 y 2022, Meriño decretó sin justificación y sin fundamento la realización de pericias contables en causas a su cargo. Según la investigación, estos informes resultaron inútiles y de baja calidad, además de que se realizaron infringiendo normas del Código de Procedimiento Civil.
El caso partió con una denuncia anónima recibida por el Ministerio del Interior. A esta se sumaron las declaraciones de personas que trabajan o trabajaban en el tribunal, las cuales permitieron establecer un patrón de conducta. Los contribuyentes pagaban honorarios a los peritos por las pericias contables ordenadas por el juez.
Parte de esos dineros llegaban al entorno del juez Óscar Meriño a través de interpósita persona, es decir, una persona que actúa en un acto jurídico en nombre de otra, aparentando obrar por cuenta propia, pero en realidad lo hace por encargo y en beneficio de otro. Los fondos se canalizaban a una sociedad formada por la madre y hermano del exjuez.
Esquema para beneficios económicos de juez y chat encriptado en app desconocida
El fiscal de Alta Complejidad, Jaime Retamal, describió a La Radio la operación como “un esquema destinado a obtener beneficios económicos indebidos”. Hasta el momento, la Fiscalía identificó tres causas importantes donde contribuyentes con reclamos tributarios vieron cómo se designaban estas pericias, cuyos honorarios terminaban en el círculo del exjuez.
En la audiencia, la fiscalía señaló que “tenían un grupo encriptado, digamos por mensajes, donde daban a entender de todo lo que estaba pasando dentro de la investigación”. Esto demostró un esfuerzo por coordinar y ocultar las actividades, expuso el persecutor.
Entre las diligencias clave se cuentan la entrada y registro del Tribunal Tributario Aduanero y la incautación del teléfono de Meriño. El análisis del dispositivo identificó grupos de WhatsApp que vinculaban al exjuez con su entorno, donde conversaban sobre pagos. También se detectó el uso de una aplicación encriptada desconocida, que forma parte de las indagatorias.
La defensa del exjuez alegó que las denuncias partían de una funcionaria despedida, lo que, a su juicio, restaba credibilidad. Sobre esto, el fiscal Retamal fue categórico: “Nosotros hemos analizado todos los antecedentes que han llegado a la investigación y es por eso que tomamos declaración a esta persona. Su testimonio a nosotros nos parece creíble y verosímil”.
Declaraciones corroborarían la mecánica delictual
El representante del Ministerio Público añadió que la credibilidad del testimonio se basa en que “está corroborado por otras personas que trabajan o trabajaron en el tribunal que básicamente relatan la misma mecánica”. Los testigos coincidieron en describir un período en que se designaban estas pericias siempre a un número reducido de peritos, de un listado enorme.
Los informes periciales se caracterizaban por ser “de baja calidad, innecesarias y regularmente favorecían al contribuyente; o sea, favorecían a la persona que pagaba la pericia”. El fiscal enfatizó que, “al margen de los cuestionamientos”, existe “un grupo de declaraciones que están unidas entre sí, que están corroboradas entre sí”.
Respecto a la resolución que decretó la prisión preventiva, el fiscal Jaime Retamal dijo que “nosotros estamos satisfechos con la resolución del Tribunal (…) pudo dar cuenta en su razón, en su resolución, del contenido de la denuncia y de todas las declaraciones”.
Investigación centrada en la trazabilidad del dinero
La investigación fue calificada como compleja debido al mecanismo para hacer transitar los dineros desde los peritos hasta el entorno del exjuez. El persecutor señaló que los dos meses que restan del plazo de investigación, aunque no son los seis que se pedían, “son suficientes también para seguir avanzando en las diligencias que continúan en curso”.
Retamal aseguró que “vamos a utilizar el plazo judicial designado por el Tribunal con la mayor premura”. Agregó que “faltan realizar algunos otros análisis de trazabilidad de dineros. Aquí se han levantado cuentas corrientes y hay todo un trabajo que está realizando personal experto en relación con la trazabilidad”.
Respecto a otros involucrados, el fiscal confirmó que “los peritos tienen la calidad de imputados y algunos de ellos han declarado. Algunos de ellos han guardado silencio”. Sobre las personas identificadas en el chat encriptado en la app desconocida, afirmó que “efectivamente, esas personas también están siendo investigadas” y que “naturalmente hay diligencias en curso” sobre ellas.