El Ministerio Público y la PDI detuvieron la tarde de este martes al abogado Óscar Meriño Maturana, hoy ex juez titular del Segundo Tribunal Tributario y Aduanero, por recibir coimas para favorecer —con millonarias asignaciones— a peritos contables con quienes mantenía nexos.
Según información recabada por la Unidad de Investigación de Bío Bío, la diligencia fue concretada a eso de las 13:45 horas, tras una solicitud del fiscal de Alta Complejidad Centro Norte, Jaime Retamal Herrera.
Fuentes consultadas por este medio detallaron que el imputado será formalizado este miércoles ante el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, por cohecho agravado.
De acuerdo con antecedentes contenidos en el expediente judicial, Meriño —en su calidad de juez— ordenaba peritajes respecto de “asuntos innecesarios” y “sobre temas que ya habían sido resueltos”. Dichos informes —rezan declaraciones de testigos contenidos en la indagatoria— eran encargados a profesionales que tenían vínculos cercanos con el imputado.
Casi de manera paralela, él y su círculo íntimo recibía pagos provenientes de esos peritajes.
¿El perjudicado? El fisco
Un informe policial sostiene que los peritajes se realizaron sin un criterio técnico sólido y la calidad de los informes eran deficientes, lo que terminaba por favorecer a los contribuyentes. Es decir, a empresas o particulares que mantenían algún litigio tributario en su tribunal. Y, por tanto, en perjuicio del fisco.
En uno de los casos, por ejemplo, uno de los peritajes dejó sin efecto una liquidación del Servicio de Impuestos Internos (SII) que ordenaba a una empresa reintegrar casi 980 millones de pesos a las arcas estatales.
Información analizada por BBCL Investiga detalla que los peritos cobraron millonarias sumas de dinero a cambio de preparar los documentos contables. El monto más abultado del que se tiene registro alcanza las 5.570 UF. Es decir, unos 220 millones de pesos a cambio actual.
Todo en familia
Documentos judiciales tenidos a la vista por este medio revelan la trazabilidad del dinero que hoy es considerado por los investigadores como coimas. En el modus operandi se incluyen pagos en efectivo, la utilización de intermediarios (entre ellos, el hijo de los peritos favorecidos) y canalización de fondos a personas clave del entorno del juez.
Una querella del Consejo de Defensa del Estado (CDE) apunta a que uno los profesionales recibió casi $13 millones a cambio de un peritaje contable. Al día siguiente, transfirió el 45% a su hijo. Este último, ese mismo día, transfirió ese mismo porcentaje a la pareja del hermano del juez Meriño. El dinero finalmente llegaría a las cuentas del propio imputado.
En vista de estos antecedentes, se espera que este miércoles pase a control de detención y se le comuniquen cargos por cohecho agravado. En la instancia, su defensa tendrá la posibilidad esgrimir argumentos para desvirtuar o aceptar las imputaciones.
A comienzos de año, Meriño fue removido por la Corte de Apelaciones de Santiago tras obtener malas calificaciones. Intentó revertir su evaluación ante la Corte Suprema, pero la máxima magistratura mantuvo la decisión de expulsarlo. El portazo final llegó justamente este mes, cuando le rechazaron finalmente el recurso de protección que había interpuesto contra Romy Rutherford, la ministra del tribunal de alzada capitalino que lo evaluó deficientemente.
Su cargo actualmente está vacante.
Lea la querella del CDE aquí