La Contraloría General de la República rechazó la revisión de las mochilas a estudiantes del Instituto Nacional, impulsada por el alcalde de santiago, Felipe Alessandri.

La iniciativa forma parte de una serie de medidas para combatir los hechos de violencia que ocurren en el establecimiento más emblemático de la comuna. Esto luego que desde hace semanas un grupo, al que Alessandri define como anárquico, ha protagonizado una serie de incidentes.

La medida en cuestión fue instaurar comisiones de apoderados que revisen de forma aleatoria las mochilas de los estudiantes, esto con la intención de encontrar, por ejemplo, las bombas molotov que los manifestantes suelen lanzar en los mencionados hechos de violencia.

En respuesta, los concejales Natalia Contreras (Revolución Democrática) y Alfredo Morgado (PPD) acudieron a Contraloría, para que se exprese respecto de la legalidad de la polémica medida, acusando que vulnera derechos constitucionales de los alumnos, como la igualdad ante la ley; y también normas como que Carabineros y la PDI son los únicos autorizados para ejecutar ese tipo de medidas bajo ciertos criterios.

La municipalidad debe “ajustar sus actuaciones”

Ante esto, Contraloría resolvió que “no procede que la Municipalidad de Santiago establezca un procedimiento que implique que personal de esa entidad edilicia revise las mochilas de los alumnos del mencionado establecimiento educacional”.

El ente contralor fundamentó su decisión en la Convención Internacional de los Derechos del Niño promulgada en Chile en 1990, destacando que “ningún niño será objeto de injerencias arbitrarias o ilegales en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia ni de ataques ilegales a su honra y reputación”.

Por lo tanto, concluyó, “corresponde que la Municipalidad de Santiago adopte las medidas que resulten necesarias para ajustar sus actuaciones a lo señalado en el presente pronunciamiento”, teniendo 15 días para informar al respecto a Contraloría.