Un hombre imputado bajo la ley de arma, por tener en su vivienda de Punta Arena un lanzacohetes antitanque, pidió su sobreseimiento, argumentando que no tenía municiones para ocupar el armamento.

El arma modelo ARMBRUST es de uso bélico, puede perforar hasta medio metro del blindaje de un tanque y acabar con toda una tripulación. Se utilizó en la Guerra Fría y durante el conflicto de los Balcanes en los 70. Según el propio imputado, la compró en una feria de las pulgas a 30 mil pesos.

Detenido y enviado a prisión preventiva, Aguilar Becerra está acusado de infringir la Ley de Armas. El Ministerio Público solicita que se le condene a 4 años de cárcel.

El viernes pasado, su defensa solicitó sobreseer la causa y dejar al imputado en libertad. Argumentaron que la posesión del lanzacohetes no revestía de peligro, pues no tenía su granada de carga.

“Se trata de un elemento que por sí mismo es inútil.
Técnicamente hablando, no cuenta con lo necesario para producir una afectación al control del Estado sobre las armas de uso bélico”, argumentó el defensor.

Con los códigos legales en la mano, el fiscal Sebastián González se opuso al fin de la causa. “Las partes o piezas también son sujetas al control de la ley respectiva”, dijo.

La última palabra la tuvo el juez Cristián Armijo. Tras escuchar a las dos partes, se inclinó por la posición del Ministerio Público y negar el sobreseimiento definitivo. Además, rechazó variar la medida cautelar de prisión preventiva.