Los alcaldes de Paillaco y Futrono estudian estrategias para evitar una crisis sanitaria por el manejo de los residuos domiciliarios en la región, considerando reabrir el vertedero bicomunal El Llolly.

Crítica es la situación de la basura en la región de Los Ríos y el panorama se agudizó luego que autoridades revelaran que en los próximos 11 meses el vertedero de Morrompulli debe cerrar, dejando a todas las comunas de la zona sin la posibilidad de depositar sus desechos en este lugar.

Es por eso que alcaldes estudian diferentes estrategias para evitar una crisis sanitaria. El jefe comunal de Paillaco, Miguel Ángel Carrasco, señaló que la intención es activar acciones de reciclaje y reactivar el vertedero de El Llolly.

Una alianza que la autoridad mantiene con el alcalde de Futrono, Claudio Lavado, quien también apuesta por reabrir el mismo vertedero.

Las autoridades acordaron crear un comité técnico, conformado por profesionales de ambas comunas, con el propósito de elaborar un plan de acción a corto y mediano plazo, que tendrá como objetivo coordinarse con las autoridades regionales para obtener las resoluciones ambientales y los recursos necesarios para salir de esta compleja situación.