El diputado por la región de Valparaíso, Hotuiti Teao, pidió celeridad en la aprobación del proyecto que prohíbe el uso de celulares en las salas de clases de educación parvularia y básica. Además de la adicción y la dependencia, el parlamentario argumentó otras consecuencias negativas para la salud de los menores.
El diputado Hotuiti Teao solicitó la pronta aprobación del proyecto de ley que busca la prohibición del uso de celulares en las salas de clases de establecimientos de educación parvularia y básica.
Se trata de una iniciativa presentada a principios de julio por los parlamentarios Mauricio Ojeda, Hotuiti Teao, Emilia Nuyado, Gonzalo Winter, Marisela Santibáñez, Gaspar Rivas, Marco Antonio Sulantay, Raúl Leiva y Ericka Ñanco.
El proyecto se apoya en legislaciones comparadas como la de Francia, donde desde el 2018 está prohibido el uso de teléfonos móviles y cualquier dispositivo electrónico de comunicación en cualquier actividad educativa, dentro o fuera de la escuela.
En ese sentido, el diputado Teao comentó que si bien puede existir algún tipo de flexibilidad en determinados casos “durante el break de descanso o el almuerzo para contactar a padres ante emergencias o reportes, apoyamos que no se use celulares y/o tablets tanto en los recreos como en clases y actividades extra programáticas”.
“Estamos hablando de la aplicación de esta normativa para menores en cursos de párvulo y educación básica, es decir, cuándo están en pleno proceso formativo y en edad de usar celulares bajo supervisión de adultos”, agregó.
Lo anterior, destacando que el uso de celulares constituye un factor distractor “no sólo debido a la adicción y dependencia”, sino que también “en la generación de trastornos del sueño, déficit de atención, retrasos cognitivos y problemas de aprendizaje en general”.
“No queremos niños pegados al teléfono”, dice el diputado Teao
Además de no utilizarlo en las actividades debido al riesgo de interferir en el aprendizaje de los estudiantes, el diputado por la región de Valparaíso agregó “que no los utilicen en el periodo del recreo puesto que es allí donde aprenden a relacionarse entre ellos y con su entorno”.
“Las pausas entre clases, contribuyen al desarrollo del lenguaje emocional, cognitivo y social y, además, son necesarias para que haya un tiempo para elaborar lo que se está aprendiendo. No queremos niños pegados al teléfono en vez de estar compartiendo y generando habilidades sociales con los pares, durante los momentos de despeje”, dijo.
Finalmente, concluyó que se reconocen las bondades de la tecnología y por lo mismo el proyecto busca “normar la utilización de la misma en aparatos que pueden generar consecuencias negativas para niños pequeños en instancias de aprendizaje fundamentales que determinarán su futuro desarrollo y calidad de vida”.
