El secretario nacional de la Democracia Cristiana, Gonzalo Duarte, se refirió este lunes a la difícil situación que vive su partido: “Estamos viviendo un momento de crisis, no cabe ninguna duda”. Lo anterior, tras los pocos votos alcanzados en las últimas elecciones presidenciales y parlamentarias, y las posteriores renuncias de Carolina Goic y Matías Walker.

Respecto a la presidencia de la falange, Duarte fue conciso en recordar que “la subrogancia está establecida en la inscripción de la lista y eso no se va a modificar salvo elección universal y directa de los militantes”, descartando por ahora citar a un Consejo Nacional con el objetivo de resolver el futuro de la mesa directiva.

“Por el momento no hemos citado a nada (…) la institucionalidad sigue funcionando”, dijo el secretario, confirmando con ello que Myriam Verdugo asume la presidencia de la Democracia Cristiana hasta la Junta Nacional del 28 de enero, donde se convocará a elecciones formales. Verdugo se presentará en la sede de la DC hoy a las 14:30 horas, sin embargo, en rigor asumió el mismo día que renunció walker.

Segunda Vuelta y conflictos internos

Según Duarte, “la definición del partido para la segunda vuelta es clara y fue asumida por su Consejo Nacional”, aludiendo al apoyo irrestricto hacia Alejandro Guillier.

Respecto a los problemas internos, el secretario nacional advirtió que estos deben resolverse a puertas cerradas y no a través de los medios; menos con participación de otros partidos.

En la misma línea, y respecto de la salida de Walker, quien dijo que esperaba que su renuncia descomprimiera el ambiente, Duarte señaló que “espero que todos los espíritus se calmen, que haya un poco más de silencio y menos locuacidad entre los camaradas”.

Por último, el secretario nacional aseguró que aún no es tiempo de decidir sobre el futuro domicilio político de la falange: “será formando parte de la coalición o no formando parte de la coalición, es parte de lo que resolveremos con posterioridad”.