Aún no habría acuerdo al interior de la Nueva Mayoría respecto al rumbo que debe tomar la reforma al sistema de pensiones.

La propuesta B de la Comisión Bravo, según fuentes al interior del comité técnico de Hacienda, sería en un 80% la base de la eventual propuesta que se le entregaría a la presidenta Bachelet.

En ese escenario, se intentaría replicar un modelo como el del fondo de pensiones del gobierno de Noruega o el de Canadá.

El presidente del Senado, el DC Andrés Zaldívar, planteó que realizará observaciones una vez que exista “un acuerdo común” y, de pasada, hizo una nueva alusión relativa a la “cocina”.

La posibilidad de que la entidad encargada de administrar el 5% extra en la cotización sea el Instituto de Previsión Social no habría sido contemplada en la última reunión del comité realizada este lunes en Teatinos 120.

Al respecto, el candidato presidencial del Partido Radical, Alejandro Guillier, afirmó que una entidad estatal debería administrar las pensiones, pero independiente del gobierno de turno.

En tanto, la carta del PPD, Ricardo Lagos, señaló que las ganancias de las AFP deben ser reguladas.

El gerente general de la Asociación de AFP, Fernando Larraín, dijo que un administrador estatal de los nuevos recursos no va “necesariamente” va a mejorar las pensiones.

Así, parte del borrador que sería entregado a la presidenta Bachelet consideraría la creación de un cuarto pilar contributivo, el que no recurriría a recursos fiscales directos; no habría corte por nivel de ingresos y todos los cotizantes tendrían parte de sus recursos en el sistema público, pero mayormente en el privado, combinando cuentas nacionales con capitalizadas.