El grupo agroalimentario francés Danone, cuyas ventas están en caída debido a la pandemia de covid-19, anunció este lunes que va a suprimir hasta unos 2.000 puestos de trabajo en Francia y en el extranjero para “simplificar” la organización y volver a crecer.
La supresión de efectivos afectará a todas las estructuras que supervisan los países, como “nuestras sedes en Amsterdam, Singapur y París”, declaró el presidente de Danone, Emmanuel Faber.
En Francia, Danone va a suprimir entre 400 y 500 empleos, principalmente de dirección y administrativos.
El plan, llamado “Local First”, apunta a “darle poder a las instancias locales” en los países donde Danone está implantado.
El grupo espera “un recorte de unos 700 millones de euros (unos 830 millones de dólares) en gastos generales y administrativos”, indicó un comunicado de la empresa.
Además la empresa apuesta a mejorar la “productividad industrial para reducir en 300 millones de euros el costo de los productos”, agregó.
Se trata de “acelerar la digitalización” y la robotización de las fábricas, y de pasar de “una media docena de fábricas muy digitalizadas” a 40 en 2023, dijo Faber.
“El objetivo del plan es retomar el camino del crecimiento rentable”, sostuvo Faber a través de un crecimiento “de 3% a 5% anual rentable”.
En los primeros nueve meses del año, Danone registró una baja de 5,4% de la facturación que fue de 18.000 millones de euros (unos 21.300 millones de dólares).
La pandemia de covid-19 castiga en particular las ventas de agua embotellada (-20,5%), muy afectada por los cierres de bares y restaurantes.
