Venezuela salió en diciembre de 2021 de una hiperinflación. Si embargo, los datos económicos actuales del país no son nada alentadores.

La inflación de enero en Venezuela fue de 39,4%, 2,2 puntos porcentuales más que en diciembre, según datos difundidos por el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), entidad independiente al margen del Banco Central.

“La tasa de inflación de enero de 2023 se situó en 39,4%, en tanto que la tasa anualizada fue de 440%. Estas cifras sugieren que la economía venezolana entró en una fase de fuerte aceleración de la inflación, como expresión de la inestabilidad macroeconómica que se ha venido observando”, señaló el OVF en nota de prensa.

Esta inestabilidad, prosiguió, se debe a que el “Gobierno no pudo seguir sosteniendo la estabilidad del tipo de cambio que aplicó hasta agosto pasado”.

El observatorio agregó que en ese contexto, la tasa de cambio ha tenido una tendencia “significativa” al alza que se “retroalimenta con las expectativas de devaluación e inflación que se generan ante la falta de un programa económico que propenda a la estabilidad y el crecimiento”.

Los sectores que más aumentaron en enero fueron comunicaciones, con un alza del 258,8%; vestido y calzado, con un incremento del 48,3%; alimentos, con una subida del 35,5%; transporte, con un 26,6%, y alquiler de vivienda, con un 25%.

El OVF sostuvo que, con estos datos, el país “enfrenta un evidente peligro de volver a entrar en otro episodio de hiperinflación”.

Venezuela salió en diciembre de 2021 de una hiperinflación en la que entró en 2017 y que, por cuatro años, redujo el valor del bolívar, la moneda oficial, así como la confianza de los ciudadanos en ella, por lo que adoptaron de manera no oficial el dólar en un intento de proteger sus ingresos.