Preocupan en la región las bajas cifras de donación de órganos, lo que parte por una conversación en la familia y requiere del respeto a la voluntad y el entendimiento del bien común. Se reconoce además la necesidad de avanzar en materia legislativa.

A nivel nacional los trasplantes son una de las grandes deudas de nuestra sociedad, registrándose a la fecha 235, gracias a la voluntad de 88 donantes, levemente superior al año pasado, pero insuficiente.

En el caso de la Región del Bío Bío, el 2014 se realizaron 16 procuramientos, y a la fecha van 10; mientras que en cifras de trasplantes si bien el año pasado se hicieron 30, ahora en septiembre recién alcanzan 15.

El intendente subrogante, Enrique Inostroza, insistió en que se trata de una decisión familiar que debe discutirse con anterioridad.

Mientras, el director del Servicio de Salud Concepción, Marcelo Yévenes, indicó que si bien hubo un avance legislativo, hay que apuntar a la declaración hecha en vida por los pacientes.

Quienes han tenido la suerte de recibir este “precioso regalo”, un órgano donado, explican cómo cambia la vida.

Sin embargo hoy como sociedad estamos permitiendo que personas mueran por falta de una donación, ya la gente no apela a temas religiosos, ni filosóficos, sino a que sus familiares no lo plantearon, por lo que vale la pena tener una conversación necesaria con los suyos.