El primer ministro escocés, el independentista Alex Salmond, anunció este viernes que dejará su puesto, así como el liderazgo del Partido Nacional de Escocia (SNP) en noviembre, tras el fracaso del “Sí” a la independencia en el referéndum del jueves.

“He comunicado al secretario nacional del SNP que no me volveré a presentar como líder del partido en la conferencia anual”, que se celebra del 13 al 15 de noviembre en Perth, “y que dimitiré de mi puesto de primer ministro”, dijo Salmond en rueda de prensa en Edimburgo.

“Hasta esa fecha, seguiré cumpliendo con mi mandato”, añadió Salmond, de 59 años, que posteriormente prevé volver a los escaños del parlamento escocés como diputado por Aberdeenshire East.

“Creo que al partido, al parlamento y al país les vendrá bien un nuevo liderazgo”, dijo este viernes, añadiendo que ha sido “el privilegio de mi vida” desempeñar el papel de jefe del gobierno regional escocés.

El anuncio de Salmond es una sorpresa en tanto que el líder nacionalista ha conseguido que el apoyo a los independentistas llegue a unos niveles (44,7%) hasta hace poco inimaginables, y que los partidos de Westminster le prometieran un mayor nivel de autogobierno a Escocia ante el temor de que triunfara el “Sí”.