Dos importantes sitios arqueológicos de Guatemala declarados patrimonio mundial podrían perder dicha condición debido a la deforestación, advirtió este lunes el Fondo de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Los centros arqueológicos mayas de Tikal en Petén (norte del país) y Quiriguá en Izabal, en el suroeste, son dos de los cuatro sitios reconocidos como patrimonio mundial que se encuentran amenazados, dijo la directora y representante regional de Unesco para Centroamérica y México, Pilar Álvarez, en declaraciones a un diario local.

De acuerdo con la experta, Tikal y Quiriguá están reconocidos por la Unesco como patrimonio mundial pero son los que más riesgo afrontan, principalmente debido a la deforestación en zonas de amortiguamiento, adyacentes a los límites de las áreas naturales protegidas.

Álvarez dijo al diario Prensa Libre que la advertencia de los riesgos “es una llamada de atención no solo al Gobierno sino a los expertos, la comunidad civil, para quienes están participando siempre en ese esfuerzo, incluida la cooperación internacional e intereses empresariales”.

Según el último informe del estatal Instituto Nacional de Bosques, la cobertura boscosa guatemalteca rebasa los 3,7 millones de hectáreas, pero cada año se pierden 146.000 hectáreas.

Petén cuenta con 1,8 millones de hectáreas boscosas, la más extensa del país, en su mayoría dentro de la Reserva de la Biósfera Maya, donde se ubica el Parque Nacional Tikal y más de 10 corredores biológicos o parques naturales.