El avión de Malaysia Airlines desaparecido desde hace una semana fue aparentemente desviado de forma deliberada y voló durante horas después de desaparecer de los radares, anunció el sábado el primer ministro malasio Najib Razak, sin confirmar sin embargo que el aparato haya sido secuestrado.

El Boeing 777 de Malaysia Airlines cambió bruscamente de rumbo, orientándose hacia la península malasia, un movimiento “coherente con una acción deliberada de alguien en el interior del avión”, declaró el sábado el jefe de gobierno durante una conferencia de prensa.

Los investigadores creen “con un alto grado de certeza” que los sistemas de transmisión de datos del Boeing 777 “fueron desactivados manualmente,” el primero justo antes de sobrevolar las costas orientales de la península y el segundo entre Malasia y Vietnam, añadió el primer ministro.

“Es extremadamente fácil desconectar el transponedor (transmisor/receptor automático)”, explica un experto aeronáutico que pidió el anonimato. “El sistema pudo haber sido desconectado por un miembro de la tripulación o un pasajero que haya seguido tres o cuatro lecciones de vuelo”, añade.

No obstante, el sistema ACARS del Boeing 777, que permite intercambiar informaciones entre la aeronave y el centro de operaciones de una compañía aérea es mucho más difícil de desconectar. Según este experto, “se necesita tener un excelente conocimiento del dispositivo”.

El vuelo MH370 de Malaysia Airlines cambió de rumbo, a medio camino entre las costas de Malasia y Vietnam, una hora después de haber despegado de Kuala Lumpur, con 239 personas a bordo.

Contactos vía satélite indican que el avión siguió volando durante más de seis horas y media, hacia el Océano Índico, después de haber desaparecido de los radares civiles, indicó el primer ministro.

Pero “pese a informaciones de prensa sobre un secuestro, quiero ser muy claro: seguimos investigando todas las posibilidades que pudieron provocar el cambio de dirección del MH370″, subrayó el jefe de gobierno.

Acto planeado y deliberado

El primer ministro también anunció el fin de la búsqueda en el Mar de China meridional, debido a las informaciones de que el aparato desvió su ruta hacia el oeste de la península malasia.

El avión podría encontrarse en cualquier sitio entre “Kazajstán y Turkmenistán hasta el norte de Tailandia, o un pasillo en el sur aproximadamente desde Indonesia hasta el sur del Océano Índico”.

La investigación parece dejar de lado parte de las hipótesis sobre la misteriosa desaparición, como la posibilidad de una explosión repentina en el aire, de un fallo mecánico o de un accidente en el Mar de China meridional.

Varios expertos destacan el carácter excepcional de este caso, uno de los más misteriosos de la historia de la aviación moderna.

Las motivaciones de esta “acción deliberada” son “extremadamente difíciles de entender”, consideró Gerry Soejtman, un analista de aviación basado en Yakarta, en declaraciones a la AFP.

“Si fue deliberado, podemos estar lidiando con algo que va más allá de la misión planeada para el 11S”, añadió.

Todo apunta a que se trató de “un acto planificado y deliberado”, sostiene Scott Hamilton, director del gabinete Leeham Co.

Evitar los radares civiles

Poco antes de las declaraciones del primer ministro, un responsable militar malasio señaló a la AFP que los investigadores creen que el avión podría haber sido desviado hacia el Índico por una persona con un profundo conocimiento de las rutas aéreas y de las posiciones de los radares.

“Forzosamente se trataría de un piloto experimentado, competente y en actividad”, declaró, pero no especificó si las sospechas apuntan a un secuestrador entre los pasajeros o a un integrante de la tripulación.

“Parecía saber muy bien cómo evitar los radares civiles. Parecería que los hubiese estudiado muy de cerca”, agregó este responsable militar.

Según periodistas malasios, la policía registró el sábado la casa del piloto, Zaharie Ahmad Sha, de 53 años. La policía no ha hecho sin embargo ningún comentario al respecto.

The New York Times dijo el viernes que el avión habría cambiado de dirección y altitud varias veces tras haber perdido contacto con las torres de control.

De acuerdo con el diario, que cita fuentes cercanas a la investigación, el avión se elevó hasta 13.700 metros de altura, muy por encima del límite permitido para un Boeing 777, antes de descender de manera irregular hasta una altura aproximada de 7.000 metros cuando se encontraba cerca de Penang, una isla de Malasia muy poblada.

Luego, el avión que se dirigía al suroeste habría recuperado altitud y cambiado su curso hacia el noroeste, en dirección al Océano Índico.

El Pentágono confirmó el envío de un barco y de un avión para ayudar en la búsqueda al noroeste de la península malasia.

La Marina india concentra su búsqueda ahora en dirección del golfo de Bengala, con ayuda de seis barcos y cinco aviones.

El Boeing 777, uno de los aviones más seguros del mundo, desapareció en una noche clara, sin perturbaciones meteorológicas. No envió ningún mensaje de auxilio.