El cigarrillo es conocido como uno de los elementos más adictivos para el ser humano -por su alto contenido de nicotina-, como también por ser uno de las principales responsables del cáncer al pulmón en sus consumidores.

Por lo mismo, es que la Organización Mundial de Salud en conjunto con otras entidades expertas, decidieron instaurar los 31 de mayo el “día mundial sin tabaco” con el fin de difundir políticas, que inviten a dejar este hábito que pone en riesgo a un importante porcentaje de la población.

Pero, ¿Con cuántos cigarrillos diarios puedo ser calificado como un adicto? En ese sentido, en conversación con BioBioChile, el psicólogo de la Universidad Mayor, Edmundo Campusano, fue tajante: “No tiene que ver con la cantidad que una persona consume, sino más bien la capacidad de control respecto del cigarro… de todas maneras la vinculación entre cáncer y cigarrillo es mayor en quienes fuman más”, aseguró.

En relación a lo mismo, Campusano añadió que “sea 1 o sean 20 cigarrillos lo que la persona fume, cuando no puedo detenerme estoy en una conducta adictiva. Hay personas que pueden fumarse 10 cigarros en medio de una comida, pero quizás al otro día no lo necesita y simplemente no lo hace”.

Entonces, ¿Cómo puedo reconocer si soy un adicto? El docente explicó que además de los síntomas fisiológicos que pueden generarse, “es cuando el tabaco se hace parte de la vida social de las personas, cuando se relaciona con la vida que llevan”.

Eso sí, el académico también consignó los efectos que causa en una persona el no tener el elemento, la principal prueba de su dependencia. “Habitualmente aumenta la ansiedad, la presión cardíaca, como también existe agitación, sudoración, angustia. También aparece el estrés, el individuo anda mal genio, hay dificultades para dormir”.

Finalmente, Campusano también hizo referencia a la relevancia que tiene la madurez emocional para no caer en una adicción. “Las personas que son más maduras pueden regular sus efectos, les es más fácil controlar sus adicciones, por eso en adolescencia o niñez es más fácil volverse adicto”, aseveró.