A diferencia de los excelentes resultados obtenidos en los últimos dos años en la PSU, el Colegio Inmaculada Concepción salió del Top Ten de los mejores puntajes de establecimientos subvencionados de la provincia en el proceso 2013. Esta baja se da tras un año en el que el colegio se vio envuelto en una serie de polémicas a raíz de la anunciada y frustrada venta del inmueble donde funciona.

Coincidencia o no con la pugna surgida al interior del establecimiento, el hecho es que los puntajes obtenidos por las egresadas de cuarto medio estuvieron, en promedio, por debajo de los de sus ex compañeras en los últimos procesos PSU.

En 2011 el promedio PSU del centenario colegio llegó a los 601,09 puntos, mientras que el año pasado las egresadas alcanzaron los 602,35 puntos, ubicándolas en el sexto lugar de los mejores establecimientos particulares subvencionados de la Provincia de Concepción. Este año, sin embargo, el establecimiento ni siquiera figuró en el ránking de los 10 mejores, obteniendo como promedio menos de 598 puntos.

Para el dirigente del sindicato de profesores del Inmaculada Concepción, Alejandro Essmann, lo ocurrido podría considerarse, en cierto nivel, como efecto de los problemas que atravesó la comunidad educacional.

Essmann, no obstante, señaló que el cuerpo docente intentó realizar su labor con las alumnas de la mejor forma, al igual que los años interiores.

Para la apoderada Lissette Paris, cuya hija egresó de cuarto medio en diciembre, rindiendo la prueba de selección universitaria, el puntaje obtenido fue el esperado al igual que el de varias compañeras. La apoderada expresó que no creía que la situación en el Inmaculada pudiera haber afectado a las estudiantes.

Tras retroceder y anular los acuerdos de compraventa del colegio -primero con la Sociedad Anro y luego con el Arzobispado de Concepción- las religiosas sostenedoras confirmaron que el proyecto educacional continuará, incluso contratando un nuevo director para los próximos tres años.