El presidente colombiano, José Manuel Santos, presentó el miércoles ante la Asamblea General de la ONU el “nuevo y especial momento” que vive su país con el inicio de las conversaciones de paz con las FARC y dijo confiar en poder regresar el año próximo con un acuerdo en la mano.

“Mi gobierno ha tomado la determinación de avanzar con prudencia, con seriedad, con firmeza y sin repetir los errores del pasado, en conversaciones con la guerrilla para procurar el fin del conflicto armado”, dijo Santos ante líderes de todo el mundo reunidos en Nueva York.

“Asumimos estas conversaciones con moderado optimismo pero con la absoluta convicción de que es una oportunidad que no podemos desaprovechar para alcanzar una paz que no sólo le conviene a Colombia sino a toda la región”, agregó.

“Sabiendo que este proceso debe tener plazos breves y términos concisos para ser exitoso, confío en poder entregar a esta asamblea el próximo año un balance positivo de este esfuerzo que emprendemos con todo entusiasmo para lograr el fin de nuestro conflicto que ya va a cumplir 50 años”, continuó Santos.

Las FARC, fundadas en 1964 y que cuentan actualmente con unos 9.200 guerrilleros, son la guerrilla más antigua de América Latina.

A principios de septiembre, el gobierno colombiano y la guerrilla anunciaron el inicio de negociaciones para poner fin al “conflicto interno armado más prolongado del hemisferio y tal vez uno de los más largos de todo el planeta”, como lo definió el miércoles Santos en la ONU.

Las conversaciones comenzarán en la primera quincena de octubre en Oslo y continuarán luego en La Habana, con Noruega y Cuba como garantes.

Durante su discurso, Santos agradeció a esos países, así como el “acompañamiento del gobierno de Venezuela”, y de Chile.

“Hoy ante esta Asamblea General de las Naciones Unidas quiero agradecer a la comunidad internacional el apoyo que han manifestado al inicio de estas conversaciones y su disposición de cooperar y ayudar”, señaló de manera más general.