El jefe de la Comisión de Investigación de la Cámara de Representantes estadounidense, Mike Rogers, afirmó este domingo que duda que el ataque de Bengasi en el que murió el embajador norteamericano en Libia esté ligado a las protestas por una película islamófoba.

“No vi informaciones que demuestren que había una manifestación como las que estaban teniendo lugar en otras embajadas en ese momento”, afirmó en un programa de la cadena CNN el legislador republicano Rogers, para quien la operación “fue claramente concebida como un ataque”.

El embajador Christopher Stevens y otros tres funcionarios estadounidenses fallecieron en ese ataque, perpetrado el día del aniversario de los atentados del 11 de septiembre.

En un principio se pensó que los disturbios estaban causados por las manifestaciones de cólera contra “La inocencia de los musulmanes”, una película amateur que denigra la figura del profeta Mahoma, producida y realizada en Estados Unidos.

La Casa Blanca afirmó el jueves que se trató de un “ataque terrorista”, aunque Washington investiga la naturaleza oportunista o no del ataque.

Para Rogers, la administración del presidente Barack Obama tampoco actuó correctamente en este caso, ya que “dio credibilidad a este video que nadie en Estados Unidos y muy pocas personas en Oriente Medio habían visto” emitiendo mensajes publicitarios en Pakistán para condenar la película.

“Fue una muy mala idea”, juzgó Rogers.