Indígenas de Bolivia retrasaron por uno o dos días la marcha que debía comenzar este miércoles desde la Amazonia hasta La Paz, en rechazo a una carretera que el gobierno quiere construir por un parque ecológico, y evalúan cómo sortear un corte de ruta pro-vía, dijo un dirigente.

Grupos de nativos se concentraban en el poblado de Trinidad, capital del departamento amazónico de Beni -a unos 600 km al noreste de la capital-, donde evaluaban cuándo comenzar y qué ruta seguir.

“Tenemos este miércoles una reunión en Trinidad para ver cuándo sale la marcha y cómo”, afirmó el dirigente indígena Lázaro Tacó, en contacto con medios radiales.

La dirigencia indígena evalúa salir el “jueves o viernes” desde Trinidad, tal y como lo hicieran hace siete meses cuando efectuaron una marcha similar hacia la sede del gobierno y con la misma consigna: No a la ruta que partirá en dos el Territorio Indígena y Parque Natural Isiboro Sécure (Tipnis), en el centro del país.

Los nativos debían comenzar su protesta este miércoles desde Chaparina, la pequeña comarca más al sureste de Trinidad, pero entre ambas poblaciones hay un bloqueo de caminos, en la localidad de San Ignacio de Moxos, donde los lugareños apoyan la carretera que les conectará con la provincia cocalera de Chapare, en el centro del país.

Los aborígenes rechazan la vía ya que aseguran que 177 de los 300 km que tendrá la carretera generará graves daños ambientales al TIPNIS, rico en flora y fauna.

En la anterior marcha que llegó a La Paz, en septiembre pasado, obligaron al presidente Evo Morales a vetar la carretera mediante ley, pero el oficialismo organizó semanas después otra caminata de colonos afines al proyecto para pedir que la vía se construya.

Por esas fechas el oficialismo aprobó otra ley en el Congreso, que domina, para realizar una consulta indígena para que los lugareños decidan si quieren la vía, aunque varios pueblos amazónicos vetan incluso esta iniciativa.