Todo ocurrió cuando Sergio Triviños acudió al Supermercado Santa Isabel de Antofagasta a comprar algunos productos.

Según informó elmensajero.cl, el cliente decidió llevarse un Whisky que aparecía a $2.700, sin embargo al pasar por caja le cobraron $3.199. Al consultar por la diferencia de precio, el cajero se burló de él para luego derivarlo al servicio de “Atención al Cliente”, sin darle una explicación.

Ante la humillación sentida, primero por no respetarse el precio y luego por las burlas de las que fue víctima, el consumidor decidió exigir sus derechos ante la Justicia, interponiendo la denuncia ante el Primer Juzgado de Policía Local de Antofagasta.

En el juicio, el supermercado Santa Isabel se defendió señalando que no eran efectivas las acusaciones del consumidor. No obstante, el tribunal ante los antecedentes presentados, determinó que el local comercial cometió infracción a la Ley del Consumidor, pues no se justifica de manera alguna que el precio informado de un producto en las estanterías, vitrinas o góndolas, no se vea reflejado al momento de pagarlo.

Finalmente el tribunal condenó al supermercado Santa Isabel al pago de una indemnización de $499 al afectado, esto es la diferencia entre el precio del producto ofrecido y cobrado; además de $150 mil por el daño moral sufrido.