Pese a que una mala higiene bucal puede provocar serios problemas a la salud, normalmente sólo pensamos en daños asociados a la boca, caries, pérdida de piezas dentales y dolores asociados a ellos.
Sin embargo, numerosas investigaciones han permitido establecer otras afecciones asociadas al cuidado bucal, que van desde estados depresivos hasta enfermedades cardíacas.
1. Problemas en el embarazo: las mujeres sufren cambios hormonales que causan una pérdida del poder bactericida, motivo por el cual son más propensas a sufrir gingivitis, que consiste en una inflamación de las encías, o las tradicionales caries.
A esto se suma, que el organismo femenino segrega más flujos biológicos, que pueden inducir el trabajo de parto, pudiendo provocar nacimientos prematuros o bebes pequeños.
2. Diabetes: las personas que tienen caries pueden presentar dificultades para controlar el azúcar en la sangre. Además, al tener diabetes se disminuye el nivel de resistencia a las infecciones, por lo que existen mayores probabilidades de sufrir caries, según la Asociación Americana Dental.
3. Enfermedades cardíacas: Por insólito que parezca, las bacterias producto de una mala higiene bucal pueden llegar al torrente sanguíneo, y a través de él afectar al corazón.
“Actualmente, se considera que existe una asociación entre la periodontitis y la enfermedad cardiovascular, debido a que la infección es crónica, con la participación de bacterias bastante agresivas, las cuales se han identificado incluso en paredes arteriales cercanas al corazón. Estas bacterias y sus productos podrían afectar la formación de ateromas y trombos a nivel vascular”, según la Sociedad Chilena de Cardiología y Cirugía Cardiovascular.
4. Problemas Respiratorios: los gérmenes pueden transportarse hasta los pulmones causando neumonía. Además, los niños con asma que utilizan inhaladores, aumentan en un 50% sus posibilidades de tener caries, informó El País.
Algunas enfermedades dentales no causan dolor, por lo que sólo son notadas cuando alcanzan una etapa muy avanzada. Por lo anterior, es imprescindible un cuidadoso cepillado de dientes y luego enjuagar la boca con agua o enjuague bucal.
