La Federacion turca de fútbol (TFF) rechazó la demanda de retrogradar a la segunda división al campeón de la Liga, el club Fenerbahçe, implicado en una gran escándalo de partidos amañados.

El mismo Fenerbahçe había solicitado a la Federación esta medida para salvar el honor del club manchado por las acusaciones de corrupción, según su nuevo vicepresidente, Ali Koç.

“Fenerbahçe ha sido blanco de una campaña de desprestigio, se quiere deshonrar al club. Nuestros jugadores manifestaron su voluntad de jugar en segunda división, y haremos una solicitud en este sentido a la Federación”, explicó Koç, señalado como posible próximo presidente del club.

Por su parte, la TFF señaló, este sábado en un comunicado en su sitio en Internet, que había rechazado esta solicitud.

“El Consejo ejecutivo de la TFF concluyó que no había necesidad de dar marcha atrás respecto a la decisión del 15 de agosto”, haciendo referencia a la que se tomó de no retrogradar al club que, en cambio, no podrá jugar la próxima Champions League y será reemplazado por el Trabzonspor, escolta, tras las advertencias de la Unión Europea de fútbol (UEFA).