El incendio en la isla española de Ibiza, en el archipiélago de Baleares, está “estabilizado” después de haber quemado unas 400 hectáreas de vegetación desde el domingo, indicó este martes el gobierno regional balear en un comunicado.

El fuego se reactivó por la mañana debido a un cambio en la dirección del viento, según el gobierno regional, después de que el domingo obligara a evacuar por mar y tierra a unas 1.200 personas de la cala de Benirras, al noroeste de la isla.

La estabilización es el paso previo al control del incendio antes de su extinción, explicó el gobierno. El incendio, el más importante desde hace diez años en Baleares, también calcinó una treintena de coches y obligó a evacuar varias viviendas de la zona, pero no afectado a ninguna.

En total, se han contabilizado “cuatro heridos leves” desde el domingo por quemaduras e inhalación de humo. Unos 300 bomberos y 17 aeronaves siguen trabajando en la zona.

Las autoridades regionales han desmentido que el fuego haya sido causado por la explosión de un coche y apuntaron a “una negligencia que se ha originado en una cueva cerca de donde había coches”, según el conseller (ministro regional) de Medio Ambiente y Movilidad, Gabriel Vicens.

Los servicios de protección civil españoles alertaron de alto riesgo de incendio, al menos hasta el lunes, en el centro y sur del país, la cuenca del Ebro (noreste) y el archipiélago de las Canarias debido a las altas temperaturas, y a partir del miércoles, máximas de entre 40 y 42 grados en algunas zonas.