Con esta pregunta, el artista estadounidense Patrick Moberg se lanzó en su última hazaña gráfica con la cual pretende retratar a qué vicios de la vida real se podrían parecer nuestras obsesiones virtuales. Desde Twitter hasta Facebook, pasando por YouTube, Gmail y MySpace; los sitios más famosos de la web forman parte de esta reflexión que los pone frente al espejo para decirles … ¡somos todos adictos! (Internet Vices vía Gizmodo).
1.- Facebook es un vodka de arándanos rojos: esta red sirve como un verdadeo lubricante social que, como un buen vaso del alcohol ruso, te desinhibe para mejorar el desarrollo de tu “etiqueta social”. Con dicha red tienes dos opciones: puedes esconderte en ella para pasar desapercibido en ciertas situaciones -como fiestas y otros compromisos al poner en tu muro “Estoy enfermo”-, o bien puedes tomar su sabor medio dulzón y hacer que tu red de amistades y contactos perduren en el tiempo virtual.
2.- ¡Quiero un “golpeadito” de YouTube!: siempre partes diciendo “¡Dame sólo uno! (de los videos)” pero luego terminas tomando 4 ó 5 que, a medida que los disfrutas, se hacen cada vez más divertidos. De acuerdo al autor, como en una fiesta llena de tequila, ésta es una de las formas más divertidas para perder el tiempo en la web y, lo mejor, es que al rato no te acuerdas mucho de los detalles.
3.- Despertar con una pastilla energética de Gmail: tal como una píldora de cafeína, Gmail es una gran forma de estimular tu productividad enviando y recibiendo mensajes todo el día -aunque más de alguno te manda a un enlace chistoso-. Lo malo es que, además de ser adictivo, al rato te deja exhausto.
4.- Como si MySpace se pudiera aspirar desde un spray de pintura: Moberg cree que este sitio web hace que los músicos y aspirantes pierdan su credibilidad y, en vez de lucir como artistas serios ofreciendo su música, los hace ver algo juveniles ¿será tan así? Más que mal, artistas como Lilly Allen se han hecho famosas en este medio.
5.- Una línea de cocaína por tweet: finalmente, el diseñador cree que Twitter representa una de las drogas más peligrosas de todas … la cocaína. Aparentemente, el estar conectado la gran parte el día opinando sobre temas importantes, actualizando a tus amigos de tu vida o teorizando sobre la inmortalidad del cangrejo, es una obsesión que los más de 160 millones de tuiteros no pueden dejar.
Imagen | patrickmoberg.com
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